Durante mucho tiempo, la selección española de balonmano basó sus éxitos en la defender y en correr. El tipo de balonmano en el que creen Carlos Viver y José Ignacio Prades llevó a las ‘Guerreras’ a unas cotas muy altas. Pero, quien a hierro mata, a hierro muere. Y al conjunto español le tocó ayer probar de su propia medicina en su debut olímpico ante Suecia. El equipo nórdico destrozó a la carrera a un equipo español que rara vez pudo armarse en defensa. En ataque, la exjugadora valdoviñesa del Porriño Alicia Fernández dejó detalles de su calidad.
Su presencia poco o nada habría cambiado. El descalabro fue colectivo. Viver probó con Alicia Fernández solo en defensa para dirigir la transición tras cada robo. Duró poco. El equipo escandinavo mostró su poderío defensivo desde el primer minuto, apoyado en una inmensa Bundsen bajo los palos. Diez minutos sin marcar estuvieron las ‘Guerreras’ mientras Suecia percutía a la carrera una y otra vez.
Viver trató de cambiar el decorado pasando a 5:1, con Lara González en el avanzado. Funcionó de salida y España se acercó. Pero entre que pocas veces pudo defender en posicional y que las nórdicas se adaptaron pronto, el efecto se diluyó. Tanto que, tras el descanso (9-13), el combinado sueco sentenció el partido. Y eso a pesar de que en ataque Ali Fernández y la capitana Carmen Martín daban el callo y Merche Castellanos, que entró en la segunda mitad, mantuvo el buen nivel de Silvia Navarro en la primera. Desde luego, la selección no perdió por la portería.
Pero las carreras suecas seguían siendo letales. De hecho, no necesitaban ni errores de España en el lanzamiento o el pase. Las nórdicas corrían tras cada gol en saques rápidos que penalizaban los cambios ataque-defensa. Y así sellaron su rotundo triunfo. A las ‘Guerreras’ solo les queda levantarse para medirse mañana a Francia y apelar al espíritu de Londres 2012, cuyo camino hacia el bronce también empezó con derrota.
