Cosas veredes, amigo Sancho. Hugo Mallo, aquel adalid moderno de los valores de los defensas clásicos, ese jugador que siempre puso por delante su obligación en retaguardia antes que su aportación en vanguardia, pelea por el título no oficial de defensa más goleador de la Liga. Por el momento, gracias al tanto anotado el pasado jueves en San Sebastián, ya vive la temporada más realizadora de su vida profesional con 4 dianas, una más de las logradas en la campaña europea 16/17, hasta ahora su techo.
La pelea por ser el defensa más realizador de la Liga está igualada. Nadie supera los tres goles ligueros de Mallo, pero sí hay hasta otros cinco que atesoran el mismo número de tantos. Se trata de otro lateral, en este caso zurdo, como el barcelonista Jordi Alba y de cuatro centrales: Gabriel Paulista (Valencia), Germán Sánchez (Granada), Aissa Mandi (Betis) y Esteban Burgos (Eibar). Además, cumple la norma no escrita de que los defensas marcan de cabeza, ya que el capitán ha logrado todos sus goles de tal manera. Y hay que recordar que ante el Cádiz el marinense también marcó (de cabeza), pero su gol fue anulado por fuera de juego.
Más allá de esta competición, el dato habla de la metamorfosis sufrida por Mallo hasta convertirse en un jugador fundamental ya no en defensa, ya no en la salida de balón, sino también en la finalización. Sus cuatro goles sólo los superan en el presente ejercicio los 12 de Iago Aspas, los 9 de Santi Mina, los 8 de Nolito y los 6 de Brais. De hecho, es también el quinto céltico en tiros por partido con 0,7 –detrás de Nolito 1,7, Aspas y Brais 1,5 y Mina 1,4–.
En su carrera, Mallo lleva 11 goles: 1 en la 10/11 en Segunda ante el Villarreal B; 1 en la 14/15 ante el Espanyol; 1 en la 15/16 ante el Valencia; 3 en la 16/17 ante Sporting, Deportivo y Krasnodar; 1 en la 18/19 ante el Real Madrid; y los 4 de este curso ante Athletic, Llanera, Huesca y Real Sociedad.
El capitán da voz al no céltico a la Superliga
El Celta se había adherido el pasado lunes al escrito de la Liga rechazando el proyecto de la Superliga, ahora fallido. Sin embargo, ninguna voz había salido a corroborar esa oposición hasta que lo hizo Hugo Mallo el pasado jueves al acabar el duelo con la Real Sociedad en San Sebastián. Preguntado al respecto, dijo: "Quiero ser claro. Los objetivos hay que ganárselos en el campo, todo se gana en el terreno de juego y con la afición. El fútbol es de la afición y nos debemos a ellos". Apenas tres fases para corroborar las camisetas con las que los dos equipos salieron al campo: "Nin grandes, nin pequenos. Queremos seguir soñando".
También aprovechó Mallo para hacer públicas las quejas del vestuario sobre el vídeo arbitraje, aunque mordiéndose la lengua. "Me gustaría decir lo que pienso realmente pero me voy a callar. Hay mucha confusión, mucho lío. Para el próximo año espero que se vea bien, que se revise, porque el VAR es una herramienta que tiene que ayudar, no confundir", aseveró.
