El conflicto laboral en Vitrasa abrió ayer un nuevo capítulo, el de la huelga total de lunes a viernes –salvo jornadas festivas– tras varias semanas con paros convocados durante los viernes y sábados. La concesionaria del transporte urbano de Vigo, aseguró ayer a través de un comunicado que los paros “se llevan a cabo sin la totalidad del apoyo del personal”, que “de manera creciente está acudiendo a trabajar”.
En este sentido, la concesionaria remarcó que el personal cuenta con un convenio propio que “ofrece a los trabajadores las mejores condiciones” del sector en Galicia, insistiendo que pese a las dificultades que rodean a la empresa a consecuencia del covid, “el pleno empleo y el poder adquisitivo” de los trabajadores se ha mantenido.
La empresa incidió en que se presentaron mejoras al comité que “atienden directamente las peticiones” de los representantes sindicales y un calendario de reuniones –la última, el pasado viernes–, pero que “fueron rechazadas”. Por ello, Vitrasa apeló a que se “ponga fin a este conflicto desproporcionado cuanto antes”.
Por su parte, Abel Caballero insistió en rueda de prensa en que los empleados “tienen un derecho constitucional que es la huelga” y señaló que las relaciones laborales “se llevan entre empresa y trabajadores”.
