Relevo en el banquillo del Celta

Benítez se despide del Celta con una carta: "No hay que olvidar de dónde partíamos"

Benítez, en el entrenamiento a puerta abierta de enero en Balaídos. // Vicente Alonso
photo_camera Benítez, en el entrenamiento a puerta abierta de enero en Balaídos. // Vicente Alonso
El ya exentrenador celeste acudió a la ciudad deportiva la mañana del miércoles para despedirse de la plantilla y de los trabajadores

Rafa Benítez no completará la maratón de la que tanto hablaba en Vigo. De hecho, en una carta publicada en sus redes sociales reconoce que su camino y el del Celta "se separan antes de lo esperado". Los malos resultados y la desconfianza de los jugadores de su estilo de juego precipitaron su salida. "Vine muy ilusionado para ayudar a desarrollar un proyecto de tres años pero, en una época de constantes cambios, el club ha decidido terminar esta relación", cuenta en una carta de despedida.

En el comunicado, el entrenador madrileño defiende el trabajo realizado estos 8 meses en Vigo. "Nos marchamos defendiendo en todo el momento al club, el proyecto y los jugadores" y reconoce que cometió "errores". No obstante, considera que "no hay que olvidar de dónde partíamos, a dónde queríamos llegar y todo lo que nos ha ocurrido en el camino".

Por ello, llega a la conclusión de que "estar fuera de descenso mantenía la confianza intacta y estamos convencidos de que con el mismo compromiso y esfuerzo que han mostrado los jugadores durante estos meses se acabará de conseguir el objetivo".

Benítez agradece la "confianza" de Marián Mouriño, Marco Garcés y también se acuerda de Carlos Mouriño y Luis Campos. Por último, da las gracias a la afición "por su apoyo constante en un tiempo difícil y el cariño que me han mostrado desde que llegué". Termina "deseando muchos éxitos futuros" al club y se despide "un celtista más".

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