El Celta quiere enfriar el caldeado ambiente que se ha generado tras el enésimo error del VAR en contra del primer equipo, el pasado sábado contra el Sevilla, y para ello ha decidido no hablar más de arbitrajes en los próximos días para centrarse en el partido de viernes contra el Athletic, en el que intentará sumar tres puntos trascendentales para salir del puesto de descenso que ocupa actualmente.
Las declaraciones de Rafa Benítez y Iago Aspas tras el encuentro con el conjunto hispalense y el empujón del moañés al monitor del VAR, por el que ya se disculpó en las redes sociales, siguen preocupando a la directiva celeste, que teme que el Comité de Competición entre de oficio contra Aspas esta semana, lo que podría acarrear una dura sanción.
El Celta ha decidido optar por la prudencia y el silencio como estrategia, al contrario que el Granada, que ayer anunció que va a presentar una queja ante el Comité Técnico de Árbitros (CTA) y pedirá los audios de la conversación entre el árbitro y el VAR en el penalti que se señaló en su contra el pasado domingo en Mestalla.
El club vigués ya recibió explicaciones de los árbitros en una visita de la hija del presidente, Marián Mouriño, y el componente de la dirección deportiva Juan Carlos Calero, pero apenas unos días después se produjo un nuevo error en el penalti sobre Douvikas concedido primero por el canario Alejandro Hernández Hernández y anulado después por el propio colegiado a instancias del VAR.
Por ello, considera que tanto la directiva como el cuerpo técnico y los jugadores deben olvidarse cuanto antes de los arbitrajes y centrarse en el partido del próximo viernes ante el Athletic.
El Celta ha conseguido buenos resultados en San Mamés en los últimos años -dos victorias, un empate y una sola derrota en las campañas más recientes- y el objetivo es sellar la segunda victoria del curso frente a un rival que ocupa el quinto puesto en la clasificación tras su victoria del pasado fin de semana en Villarreal (2-3).
El punto sumado ante el Sevilla ha dejado al equipo de Benítez a dos de la zona de permanencia, que marca el Mallorca, por lo que un triunfo le permitiría salir del pozo momentáneamente, ya que el Comité de Competición confirmó ayer el aplazamiento del partido entre Mallorca y Cádiz y los baleares no jugarán este fin de semana.
