Manuel Orío
Palabra del Rey
La comarca de Vigo genera la mitad de la riqueza de toda la provincia y el 20 por ciento de Galicia. Es mucho, pero… ya no es la primera, sino A Coruña, y cada vez con mayor distancia. En 2000, Vigo iba por delante en este escalafón, gracias sobre todo a construcción naval y fabricación de vehículos. En 2010, Coruña ya llevaba una pequeña diferencia. En 2023 es muy importante, con el añadido de que el área de las Rías Altas avanza con mayor rapidez que el que pivota en torno a Vigo. Así que hay algo que no estamos haciendo bien. O que están haciendo mejor en la comarca coruñesa. No solo en cuanto a PIB, sino en general. La renta per cápita es sensiblemente superior en Coruña y su área y de media, un vigués recibe al año unos 2.000 euros menos que un coruñés, que no es poco. En cuanto a población, Vigo sigue por delante, pero es cierto que en términos comarcales las diferencias comienzan a estrecharse y las proyecciones estadísticas indican que a corto plazo, entre cinco y diez años, el área de la capital herculina estará más poblado, lo que puede tener consecuencias a la hora de la toma de decisiones. La llegada de miles de inmigrantes ha acelerado el censo coruñés, que llevaba décadas mortecino, más que el vigués, que se mantiene prácticamente en las mismas cifras debido a su saldo vegetativo negativo. Coruña ha consolidado su complejo industrial textil y ha reconstruido su posición financiera, en este caso en gran parte gracias a errores vigueses cometidos en el pasado. Incluso en turismo ha habido un cambio hacia el Norte gracias a un ligero descenso de la ocupación hotelera viguesa -este año bajarán del millón las pernoctaciones- y una subida espectacular del crucerismo coruñés, que roza el medio millón de viajeros, por 310.000 en el puerto vigués. ¿Hay que obsesionarse con estos datos? En absoluto, cada uno puede y debe seguir su camino, pero sería absurdo soslayarlos, por cuanto Vigo es la referencia en Galicia de A Coruña y viceversa, en todos los campos, incluyendo lógicamente el fútbol. Ahí sí hay que reconocer que estamos bastante mejor aquí y ahora.
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