La Universidad de Vigo tendrá que redactar nuevos Estatutos durante el actual mandato de Manuel Reigosa. Así lo hizo saber el propio rector durante la última sesión ordinaria del Claustro de este año celebrada ayer. La razón de este cambio, que obligará a “trabajar duramente” a los miembros del claustro, es la aprobación de la Ley Ordinaria del Sistema Universitario (LOSU) en la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades, paso previo a la luz verde en el Congreso, que previsiblemente se dará en marzo. Reigosa también destacó que este nuevo documento garantizará un mínimo del 1% del PIB para las universidades, lo que supondría 3.000 millones de euros adicionales en el sistema.
Además de esta cuestión, en la sesión de ayer, celebrada 100% por primera vez desde 2020, se informó de las principales líneas de actuación presupuestaria para 2023, se avanzó en la creación del Instituto de Agroecología y Alimentación y del Centro de Posgrado y Formación Permanente y se anunció que el próximo curso se impartirán dos nuevos grados y diez nuevos másteres.
En su informe, Reigosa incluyó información sobre los nuevos títulos que se implantarán en el curso 2023/24, en el que, si todo va bien, se pondrán en marcha doce. Serán dos grados (Diseño e Ingeniería de la Automoción –mención dual–) y diez másteres (Ingeniería Aeronáutica, Gestión sostenible del agua, Internet de las cosas, Gestión de la experiencia del cliente, Fabricación aditiva, Vehículos autónomos, Ciencia y tecnología cuántica, Enseñanza de español como lengua extranjera o segunda lengua, Biofabricación y Criminología).
El rector abordó en su informe la convocatoria del Gobierno para la creación de 16 nuevas cátedras de Inteligencia Artificial y otras 16 de ciberseguridad, todas ellas con colaboración público-privada, la mitad nacionales y la otra mitad internacionales. “Es importante ponerse las pilas para intentar que algunas de ellas vengan a la UVigo, ya que las áreas temáticas encajan con las líneas de investigación de nuestros grupos”, indicó Reigosa.
Además, el Claustro aprobó por asentimiento el informe preceptivo sobre la porpuesta de creación del Instituto de Agroecología y Alimentación, que fue presentado por Belén Rubio. No fue así en el caso de la transformación de la Escola Aberta de Formación Permanente en un Centro de Posgrado y Formació Permanente, que aglutinaría todas las funciones de la EAFP y añadiría otras como los másteres oficiales. Este tema se retiró del orden del día porque los representantes del PAS indicaron que no contaba con el informe de la Junta de Personal.
El presupuesto de 2023 escala hasta los 227 millones
Por primera vez en su historia la UVigo tendrá en 2023 un presupuesto que supera los 200 millones de euros. Así lo destacó la gerente, Yolanda Lesmes, en la sesión del Claustro de ayer, en la que presentó las líneas generales presupuestarias, que contarán con 227.915.618 euros, cuantía que supone un incremento del 14,7% en relación con el 2022. Este incremento viene derivado de la firma del nuevo plan de financiación del SUG y del incremento en la captación de fondos europeos Next Generation. Estos últimos, como adelantó la gerente, se elevan a cerca de 30 millones de euros (28.675.211) y permitirán desarrollar diferentes iniciativas y proyectos de gran interés para la universidad, como la implantación del laboratorio de comunicación cuántica, las instalaciones de la ETEA, la embarcación híbrida del CIM, la digitalización del área de gestión académica, la formación del profesorado, la adquisición de un espectómetro y el desarrollo del proyecto 5G, entre otros.
En el desglose de gastos, el presonal sigue siendo la partida principal de los presupuestos con un importe de 134.968.199 euros, un 10% más que en las cuentas de 2022 (112,3 millones), que Lesmes explicó argumentando que “además de absorber las subidas salariales reconocidas por el Estado a los empleados públicos, estos consolidan las mejoras laborales orientadas a la estabilización, homogeneización de regímenes jurídicos de aplicación a las condiciones de trabajo de todo el personal y la retención del talento”.
El documento presentado ante el Claustro también incluye las líneas básicas de actuación para el próximo ejercicio. Entre otras muchas actuaciones, destacan la elaboración de un nuevo Plan de Internacionalización, el diseño de un plan piloto para mejorar el nivel de inglés del alumnado, la consolidación del proyecto de la ETEA con la sede central del CIM y la facultad de Ciencias del Mar, un nuevo plan de captación de alumnado o la puesta en marcha de una Unidad de Diversidad “con un especial foco en la igualdad de oportunidades del colectibo LGTB+”, matizó Lesmes.
