Andrés Veramendi (1979, Perú) participará mañana en la representación de la ópera Madama Butterfly que la compañía Concerlírica traerá al Auditorio Mar de Vigo, a las siete de la tarde.
¿Qué papel interpretará mañana en Madama Butterfly?
Yo interpreto el papel de Pinkerton, un marino americano que se encuentra en Japón solo y compra una mujer, aun consciente de que el lo que quiere es una mujer americana. No obstante, la deja embarazada y la abandona. Regresa al cabo de unos años casado con otra y se entera de que tiene un hijo, por lo que quiere arrebatárselo.
Tiene ya una amplia trayectoria en el mundo de la ópera.
¿En qué momento decidió que quería dedicarse a esto?
De niño me gustaba la música, y tuve una muy buena influencia de mis abuelos, que me ponían mucha música. En la adolescencia, este interés me llevó a estudiar canto y también estuve en el Conservatorio. Lo cierto es que todo este arte me gustó mucho y me sentí muy cómodo en él. Y fue naciendo así, poco a poco y con preparación.
Psicológicamente sí que me vino muy bien, ya que fue como una comprobación de que estaba yendo por el buen camino, de que estaba haciendo lo que me gustaba y que podía hacerlo. Lo cierto es que un pequeño empujón nunca está de más.
Posiblemente el de Rodolfo, de La Bohème, haya sido el personaje que más me haya gustado, básicamente por lo sentimientos que mostraba a lo largo de la obra, y a que él y yo somos personas muy parecidas.
¿Y cuál no ha interpretado todavía y le gustaría poder hacerlo?
Existen diversos personajes a los que algún día me gustaría dar vida, pero noto que todavía no los puedo asumir, primero quiero prepararme un poco más, aunque espero no tardar mucho.
¿Cuáles son los artistas que ejercen más influencia en usted?
Pavarotti o Plácido Domingo son artistas en los que me fijo, muy conocidos y con carreras brillantes a sus espaldas.
