El bus que cayó al Lérez iba a velocidad inadecuada en una gran balsa de agua

Las conclusiones del informe elaborado por los especialistas del Equipo de Recostrucción de Accidentes de Tráfico (ERAT) de la Guardia Civil sobre las causas del accidente del autobús que cayó al Lérez en la N-541 cuando se dirigía a Vigo la pasa Nochebuena y en el que fallecieron siete personas no son tan rotundas como aseguró recientemente el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco.

Blanco aludió como causa principal al “exceso de velocidad”, sin embargo, el informe se refiere a una velocidad “inadeucada” atendiendo al trazado de la vía, las condiciones meteorológicas adversas, el estado circunstancial del firme, así como para el tipo de vehículo que conducía. Es más, determina que el vehículo de pasajeros circulaba dentro de la velocidad específica de esa carretera, sin poder establecer ninguna velocidad al estar averiado el tacógrafo.

En las causas del siniestro, el informe asegura que el “el conductor del vehículo debido a una balsa de agua de unos 15 metros de anchura que se había formado, además de la escorrentía de agua que bajaba procedente de la carretera PO-230 (Campolameiro-Vichocuntin), pierde la gobernabilidad del vehículo, saliéndose de la vía por el margen derecho". Si bien añade que “la fuerza instructora considera que el mismo circulaba a una velocidad inadecuada” atendiendo a las circunstancias antes mencionadas.

La Delegación del Gobierno respondió hace solo unos días ante las últimas reclamaciones de los concellos del Pacto de Pedre para la reforma integral de la N-541, al que se sumó Pontevedra con el apoyo de la Diputación, recordando de nuevo que la causa de este accidente y del que tuvo lugar un tiempo después con un motorista fallecido fue el exceso de velocidad. Las conclusiones del informe de la Guardia Civil, que ya obra en manos del Juzgado de Instrucción 1 de Pontevedra, sí aluden a la situación creada en el punto donde ocurrió el accidente por la acumulación de agua debido a las lluvias.

El tramo de la N-541 a su paso por Cerdedo-Cotobade tiene limitada la velocidad a 80 kilómetros por hora con una señalización vertical de recomendación a 70 en el punto del trazado para atravesar el viaducto, que es la velocidad a la aseguró el conductor que circulaba cuando se topó con la balsa de agua. El instituto armado considera que el conductor debía haber detectado la existencia de la balsa de agua en la carretera a unos 60 metros de distancia.

Falta de señalización, mantenimiento y deficiencias

La N-541 se ha convertido en un punto negro. Los alcaldes de los municipios afectados llevaban años advirtiendo de la falta de mantenimiento y el estado de una vía donde hasta después del peor accidente de autobús en Galicia, el de la pasada Nochebuena, no se colocó una señalización provisional de velocidad. El conductor, según su versión, circulaba por debajo del límite establecido, en 80, y no existía en ese momento ninguna otra advertencia sobre lo que Tráfico podía considerar un límite adecuado, al margen de la señal aconsejada en 70. La Guardia Civil sí hace referencia a la formación en esa carretera de bolsas de agua y ríos y al estado “circunstancial” del firme como factores que llevaron al autobús a hacer aquaplaning.

El informe afirma que la gran bolsa se formó a 15 metros del punto donde el vehículo acaba precipitándose al agua. Sí concluye que del tacógrafo está averiado y por tanto no hay datos sobre la velocidad y que hay una huella de fricción lateral.