Con Óscar Puente vamos a entretenernos
El ministro de Cultura -el que se ocuparía de poner en marcha la Biblioteca del Estado en Vigo- es otro y de otro partido, así que ya podemos imaginar; el de Industria, que tramita el Perte de Stellantis, también ha cambiado, aunque en este caso hay que poner a favor de obra que se trata de una tramitación administrativa, pero como mínimo provocará algún retraso; y finalmente continúa el desfile por el Ministerio de Transportes, ahora con premio para el exalcalde y follonero Óscar Puente, que ha hecho una transición espectacular: del ayuntamiento de Valladolid, a la tribuna del Congreso -con gran éxito, visto el premio- para desembocar el ministerio más importante por su capacidad de inversión. Hereda una agenda interminable, que en lo concerniente a Vigo empieza con la llegada del AVE a Galicia -el Talgo Avril, que probablemente esta vez sí funcionará en cuestión de meses- y por supuesto la madre de todos los proyectos, la variante de Cerdedo de Vigo a Ourense. Y además, los grandes clásicos, con la autovía Vigo-Porriño y la salida sur. No tengo ninguna duda de dos cosas: que va a decir que todo está en marcha y las actuaciones se desarrollarán en tiempo y forma y en que nos vamos a entretener con sus intervenciones. En cambio, el ministro de Pesca (y Agricultura) es el mismo, Luis Planas, anuncio recibido con alegría y alivio en el sector pesquero, donde se temían cualquier cosa por aquello del reparto/sudoku de cuotas y votos. Planas es un ministro de perfil eminentemente técnico que ha mantenido una política coherente en cuanto a los intereses pesqueros en la UE, sin cambiar de opinión y decir lo contrario como hace su jefe, lo que en estos momentos supone una bendita rareza.
