El presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, reivindicó ayer su bagaje político en Galicia, donde fue presidente de la Xunta durante 13 años, frente a "los insultos" que, según ha denunciado, le dirigen otros dirigentes en esta campaña para las elecciones gallegas del 18 de febrero. “Un Gobierno como el de Sánchez sería un lastre para Galicia”, apuntó Feijóo, que ironizó sobre la estrategia utilizada por el PSOE en campaña electoral, pidiendo el voto “cuando desprecian lo que votan los gallegos”. También se centró en los “socios de Sánchez” presentes en el gobierno nacional, algo que “está siendo consentido por el PSOE”.
Más de un millar se afiliados y simpatizantes populares han disfrutado de un menú que incluía empanada, callos y la tradicional carne ao caldeiro. No escatimó en elogios para la alcaldesa de Mos y "una de las mejores senadoras", Nidia Arévalo, quien gobierna con holgada mayoría absoluta tras conseguir más del 50 por ciento en las municipales de 2023. "Si todos nos movilizamos como Mos, si todos en Galicia somos Mos, vamos a arrasar el 18 de febrero", proclamó el líder del PP. Y es que Feijóo no quiere "dar un voto por perdido". Por ello, ha llamado a trabajar "a destajo" hasta el día de los comicios para que Alfonso Rueda sea un "presidente que no tenga más socios que los gallegos".
El presidente del PP ha reflexionado sobre las "dos formas" que hay de hacer mítines. Una, ha dicho, es la que hace su partido con el candidato Alfonso Rueda al frente, que "explica lo que ha hecho para después presentar su proyecto y pedir el respaldo con un balance". La otra forma es la que ha adjudicado a la izquierda, a "todos los que van a perder las elecciones y están intentando sumar todos los escaños perdedores" para conseguir una mayoría que desbanque al PP de la Xunta. Lo que hacen es "insultar a los demás", aunque él, ha dicho, ya está "acostumbrado".
"En Galicia, los insultos, las mentiras y las descalificaciones no mueven ningún voto", les ha advertido Feijóo en el tercer día de una campaña en la que se implicará con multitud de actos, muchos de ellos en paralelo a la “caravana” del candidato a la reelección, Alfonso Rueda. "No tengo que pedirle permiso a nadie para hacer campaña como hice durante varias décadas. Quiero a Galicia, amo a Galicia y, por supuesto, no puedo pedir permiso a ningún socialista para seguir queriendo, para seguir amando a Galicia", sentenció.
