Antonio Hortelano (Valencia, 1975) está detrás de la próxima propuesta de la temporada teatral de Afundación, “La ilusión conyugal”. El actor, que se hizo popular a finales de los 90 con el personaje de Quimi en “Compañeros”, llega este jueves al teatro García Barbón como director con la obra protagonizada por Álex Barahona, Ángela Cremonte y Alejo Sauras. Sobre esta nueva faceta habló para los lectores de Atlántico.
¿Cómo se siente fuera de escena?
Me siento muy bien. Siempre he querido dirigir. Es un placer desarrollarse y comprobar la evolución de uno, es otra forma de aprender sobre el oficio.
¿Qué destaca de esta experiencia como director?
No es la primera vez que dirijo, ya lo hice hace cuatro años, pero esta es la producción más importante. Me gusta ver cómo la función que tengo en la cabeza se desencadena, además cada uno de los actores aporta. Al final es un trabajo en equipo. Encuentro cosas maravillosas de las que aprendo. La obra no está cerrada, lo importante es que prevalezca la idea de la función. Al montar una producción también crecemos en equipo y estamos todos a lo mismo.
Apuesta por una historia contemporánea. ¿Qué le llamó la atención de esta obra?
Es la historia de una pareja, pero al mismo tiempo es una historia de personas. Es bonito analizar cómo compartimos también las bajezas. Muestra muchas cosas sobre la vida y cómo cada uno se enfrenta a uno mismo. Es una obra muy humana.
No parece una comedia.
El punto de vista en el que está siendo enfocada es similar al de una comedia, pero no lo es. Detrás hay un auténtico drama, aunque no lo tratamos como tal. Podemos hablar de una comedia sutil donde las cosas tienen más peso de lo que parece.
¿Es un riesgo aventurarse a montar una obra teatral?
Sí, pero cuando llega un texto que me gusta tanto, es el momento. Esto es el teatro, unas funciones salen mejor que otras. Lo importante es ser honesto con uno mismo y respetar los gustos del público.
Su popularidad le llegó con la televisión y también trabajó en el cine. ¿Qué género es más agradecido?
Yo me quedó con los tres. La cuestión no está en el género, es el proyecto que se tenga entre manos. Si hace ilusión da igual el formato. Es maravilloso.
Hay personajes que marcan la carrera de un actor y en su caso fue Quimi. ¿Qué relación mantiene con este adolescente?
Ya hace mucho tiempo de “Compañeros”. No lo rechazo, esa serie fue un regalo que aparece a veces y hay que aprovecharlo. Fue muy bonito y muy instructivo. Al trabajar cada día empezamos a confiar en nosotros. Y es lo que necesita un actor, confianza.
¿En qué papel se ve en el futuro como director o como actor?
Quiero trabajar como director, pero también como actor. Mi objetivo es continuar con los proyectos de interpretación y cuando llegue algo muy concreto, que me apasione, entregarme y levantarlo. No tengo ninguna prisa. Seguiré leyendo hasta que encuentre el texto que me llene e intentaré sacarlo adelante.
