Discordancia en la opinión, coincidencia en el resultado. Los ganadores de la Vigo+11 de +Deporte Atlántico y del circuito RunRun Vigo en global difirieron en su gusto por los trazados pestosos como el de ayer en Coia. “Fue muy duro. No me gusta nada el desnivel”, reconocía Carlos Enrique Gutiérrez al poco de cruzar la línea de meta, nuevamente victorioso. “Pero hay que reconocer que hace la carrera más bonita, más entretenida y más difícil. También para el público”, añadió. Noemí Álvarez, en cambio, disfrutó al máximo del subibaja continuo. “Me encantan las carreras con cuesta. Mucho más que las llanas”, dijo. Lo demostró. Aunque también acostumbra a hacerlo en las lisas.
Los dos vencedores destacaron el “gran ambiente” de la cita. Y en el caso de ella, que acostumbra a vencer con autoridad, subrayó la necesidad de “trabajar bien mentalmente” para competir contra ella misma. “Te ves de primera y no tienes más referencias que tu propio tiempo”, explicó. En el caso de él, la victoria llegó tras una nueva batalla contra Dani Bargiela. “Cambió el ritmo, me pegué a él y pude ganar en el último kilómetro. Está muy fuerte”, apostilló.
Anxo Otero, ganador de la 5K, también tuvo halagos para Bargiela. En su caso, porque intermedió para inscribirlo en la prueba. “Se me había pasado el tiempo. Estoy aquí gracias a él”, reseñó el redondelano, feliz por la victoria: “Soy rápido en esta distancia”.
Julia Sampedro, por su parte, se ciñó al plan. “Hay que tener un ritmo que sea incómodo, pero llevable. Ese es el punto idóneo”, destacó la vencedora de la corta distancia.
