Los centros tecnológicos de la comarca de Vigo se erigen como un gran polo de generación de empleo, con cerca de 2.000 trabajadores -la mayoría altamente cualificados- y necesitan contratar más. CTAG (automoción), Aimen (industria metalúrgica), Anfaco-Cecopesca (industria alimentaria), Gradiant (telecomunicaciones) y Energylab (efiencia energética) tienen de manera conjunta cerca de un centenar de vacantes que necesitan cubrir. La mayor demanda corresponde a ingenieros, perfiles relacionados con las tecnologías digitales, inteligencia artificial, así como personal investigador.
Sólo el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG) da trabajo a 1.200 personas de 25 nacionalidades, siendo uno de los principales generadores de empleo del sector en la comunidad gallega y el mayor en cuanto a ingenieros. Oferta en estos momentos 39 vacantes entre especialistas en ciberseguridad, ingenieros (electromecánicos, ensayos ambientales, mecatrónica, de sistemas, especialistas en térmica y de validación de vehículos prototipo) y desarrolladores de software, según recoge en su página web.
Con sede en Porriño, está inmerso en el desarrollo de más de 70 proyectos de I+D de ámbito nacional e internacional y las perspectivas de trabajo para los próximos años se centran en “la movilidad inteligente, el vehículo eléctrico, el hidrógeno renovable en movilidad y la conducción autónoma y conectada, ámbito en el que se posiciona como un referente en Europa”. Los ingresos de CTAG, procedentes de servicios tecnológicos y grandes proyectos para la industria del automóvil, rondaron los 60 millones de euros el año pasado.
También en Porriño está Aimen, un centro especializado en el campo de los materiales y las tecnologías de fabricación avanzada, que cuenta con el mayor centro de aplicación láser industrial de España. Su equipo está formado por más de 300 personas de 19 nacionalidades, de los que 52 son doctores. La edad media de su plantilla es de 39 años y tiene una distribución de género bastante equilibrada, con un 60% de hombres y un 40% de mujeres. El centro incrementó el año pasado en un 9,5% su personal y para 2024 tiene en marcha un ambicioso plan de contratación con el que pretende reforzar la plantilla en un 8% con perfiles relacionados con las tecnologías digitales, los materiales y la economía circular.
Aimen está trabajando en la actualidad en más de 120 proyectos de I+D+i sobre fabricación aditiva, robótica colaborativa y los materiales avanzados con el fin de “contribuir a la conversión de las fábricas en inteligentes y sostenibles, hacia la industria 4.0”. Concentra su actividad principalmente en movilidad aeroespacial, industria y sector energético y sus ingresos en 2022 ascendieron a 17,9 millones.
El centro tecnológico Anfaco-Cecopesca, especializado en el ámbito del sector alimentario, contó el año pasado con una media de 107 trabajadores, de los que el 73% eran mujeres y más del 90% de las contrataciones son indefinidas. Su plantilla está altamente cualificada, un 21% dispone de doctorado y casi la mitad tiene titulaciones superiores. “Para poder abordar los proyectos de I+D+i actuales y futuros necesitamos incorporar talento con conocimientos y competencias transversales, lo que nos lleva a poner el foco internacionalmente”, apunta. Anfaco necesita incorporar personal investigador con formación en tecnología de los alimentos, biología, ciencias del mar, química, formación en acuicultura, ciencias de los alimentos y biotecnología, así como personal investigador.
El centro tecnológico, con sede en el campus universitario vigués, ingresó el año pasado 8 millones de euros, desarrolló un centenar de proyectos de I+D+i y arrancó 2024 con 60. “Nuestro equipo ha permitido posicionarnos en Europa como referentes en proyectos internacionales de transición azul y con el sector mar-alimentario en la punta de lanza científica y tecnológica”.
En telecomunicaciones se erige Gradiant, centro especializado en tecnologías de comunicaciones avanzadas, ciberseguridad e inteligencia artificial. Tiene más de 160 personas en plantilla, que necesita reforzar. “El sector tecnológico en España necesita a 120.000 personas para cubrir todas las necesidades de las empresas y Gradiant no es ajeno a esta situación", apunta el centro, que demanda sobre todo perfiles como profesional técnico TIC, desarrollador de software, consultor TIC o administrador de sistemas. Acaba de lanzar Sense Aeronautics, una spin-off para dar respuesta tecnológica a los requisitos regulatorios en materia de seguridad aérea para vehículos no tripulados. Está trabajando en la creación del primer laboratorio cuántico de Galicia para desarrollar sensores de medición de alta precisión y el año pasado desarrolló 70 proyectos, 20 europeos.
Gradiant obtuvo en 2022 unos ingresos récord de 8,6 millones, un 45% más que en el ejercicio anterior, y prevé situarse por encima de los 10 millones en 2023.
En eficiencia energética, Vigo aporta otro centro tecnológico de referencia, EnergyLab, que está especializado en el impulso de la eficiencia y la sostenibilidad energética mediante el desarrollo de proyectos de innovación en 5 áreas de trabajo: bioenergía, industria, ecosistemas urbanos, tecnologías de la energía y economía circular. En 2023 celebraron su 15º aniversario, destacando que “hemos movilizado más de 22 M€ en 200 proyectos de I+D+i en los que se han involucrado a más de 150 clientes”.
EnergyLab es el centro tecnológico de referencia nacional en el ámbito de los gases renovables, con varias actuaciones destacables: la puesta en marcha de un laboratorio pionero en biogás y biometano que ha sido clave para su desarrollo como centro tecnológico; el desarrollo y puesta en marcha de la primera planta de metanación biológica en España para la generación de biometano; y ser los pioneros en la producción de hidrógeno verde en una EDAR en Galicia. En la actualidad están desarrollando nuevas líneas de investigación en torno al hidrógeno verde.
