Su errático rendimiento cada vez que dispone de unos minutos, como sucedió la pasada jornada en Vitoria, parece haber colmado la paciencia del entrenador, Fran Escribá. De ahí que ayer se mostrase crítico con él poco antes de dejarlo fuera de la convocatoria, llamando en su lugar al jugador del filial Sergio Bermejo.
El valenciano señaló, refiriéndose al encuentro ante al Alavés que "cuando cambiamos el sistema, la evolución del equipo fue buena. Tuvimos varias llegadas por su banda. Pione tuvo opciones de encarar, que es una de sus virtudes, y no lo hizo. Y en la acción del segundo gol, Iago le tiró un buen desmarque al espacio pero jugó hacia atrás". El entrenador celeste añadió que en el fútbol profesional, además de la exigencia de los técnicos sobre el jugador "es fundamental la autoexigencia y si no es grande, el rendimiento se resiente".n
