Hace tres años, Álvaro Lemos (Santiago de Compostela, 1993) jugaba en Tercera con el filial del Deportivo; hace dos, defendió los colores del Compostela en Segunda B; el curso pasado, debutó en Segunda con el Lugo; y ahora se prepara para estrenarse en Primera y en Europa con el Celta.
"Hace uno o dos años no pensaba que pudiera pasar", admite el canterano deportivista, que explica su fichaje por el club vigués con naturalidad, huyendo de los "fanatismos", y se muestra ambicioso pese a la dura competencia que tendrá en el lateral derecho.
¿Cómo están yendo sus primeros días en el Celta?
Muy bien. El ambiente que se respira aquí es muy bueno. La gente es muy atenta conmigo, con todos los nuevos, y la verdad es que es de agradecer porque venir nuevo a un club es, en parte, un poco complicado.
¿Se siente un poco de miedo a lo desconocido al cambiar de equipo?
Sí. Cuando llegas a un nuevo equipo nunca sabes lo que te vas a encontrar, aunque a mí ya me habían hablado muy bien del grupo, de la gente, de los compañeros, y es así. Estoy notando su apoyo y se lo agradezco mucho.
¿Ha tenido la oportunidad de hablar con Berizzo? ¿Qué le ha dicho?
El primer día, cuando llegué, habló conmigo. Me comentó que soy uno más, que he venido para entrenar, trabajar e intentar ganarme el puesto. Y eso es lo que voy a intentar demostrar. Vengo a trabajar, que es lo que sé hacer.
¿Qué supone para usted fichar por el Celta?
Es un paso más en mi carrera. Vengo de dar dos saltos en los últimos años, de Segunda B a Segunda y esta vez a Primera, y es muy importante para mí. A base de trabajo, se está viendo recompensado mi esfuerzo. Se lo agradezco mucho al Celta porque es un paso muy importante para mí.
Ha dado el salto a Primera y, además, a un equipo de la parte alta de la tabla. ¿Nota el cambio ya en los entrenamientos?
Sí, se nota desde el primer momento que entras. En el vestuario, en el campo, notas que este es un equipo que va a luchar por cosas importantes. La intensidad, el juego, la exigencia… Todo eso se nota y es mejor para mí, porque me ayudará a mejorar.
¿Lo más complicado de inicio será acostumbrarse a un nuevo ritmo?
Sí. Al principio lo que te cuesta es acostumbrarte a ese ritmo. Además, quizás me pesó un poco perderme los tres o cuatro entrenamientos por el pequeño susto que me llevé. Pero me voy adaptando poco a poco y la verdad es que todo va bien por ahora.
¿Ese susto en su primer entrenamiento le recordó a la lesión que sufrió en 2013, cuando estaba haciendo la pretemporada con el primer equipo del Deportivo? ¿Temió que pudiera ser algo grave?
En el momento, por cómo fue todo, sí que pensé que podía ser algo más grave. Pero bueno, se quedó en un susto, ya estoy entrenando y me encuentro bien. Lo mejor es que se quedó en una anécdota, y nada más.
Se rompió el ligamento cruzado cuando estaba peleando por dar el salto al primer equipo del Deportivo, en un momento clave en su carrera. ¿Hubo momentos de dudas o siempre creyó que pese a la lesión podría llegar a la élite?
Hubo momentos de dudas por cómo evolucionaron las cosas. Pero tenía claro que no me iba a dar por vencido. Al final, lo que hizo la lesión es que yo ganase. Con la lesión, crecí como jugador y como persona, algo muy importante para mí. Cuando voy al Compostela y vuelvo a recaer un poco, porque estuve la primera vuelta sin jugar, pasé otra vez por lo mismo, pero siempre busqué el lado positivo, trabajando y nunca dándome por vencido. Al final, acabó la temporada, en el Dépor no cuentan conmigo, pero el Lugo me hace ficha y hueco en el primer equipo. Seguí trabajando, que es en lo que yo creo, y al final ese trabajo da sus frutos.
Los futbolistas que sufren lesiones graves suelen hablar de ese aprendizaje. ¿Realmente puede salir uno reforzado de ese periodo?
Sí, es un periodo muy complicado, pero yo tuve la suerte de estar con gente que hizo que lo llevase mejor. Hasta ibas a entrenar y a recuperarte con alegría, con ganas. Iba cada día a recuperarme con ilusión y ganas de volver lo antes posible. Al final, estar con gente así te hace recuperarte antes y hace que te sientas mucho mejor.
Llegó al Lugo como extremo y acabó destacando como lateral, con José Durán en el banquillo. ¿Cómo fue el proceso de cambio?
Con Luis Milla ya jugué un par de partidos como lateral. Había bajas y yo estoy dispuesto a jugar en la posición que sea. Luego, cuando me dicen que me quieren de lateral y que voy a jugar en esa posición, hablé con Manu, el capitán, al que le había pasado un poco lo mismo, y más o menos me fueron ayudando. La verdad es que me adapté muy bien. Tácticamente, que puede ser lo más complicado, lo asimilé muy bien y en ataque, al ser extremo, ya lo llevo dentro.
Ha habido muchos casos similares en el fútbol español en los últimos años. Sin ir más lejos, los dos laterales titulares de la selección en la Eurocopa, Juanfran y Jordi Alba, comenzaron como extremos. Pero también ha habido cambios que no han acabado de cuajar, como por ejemplo sucedió con Toni en el Celta. ¿Qué es lo más complicado en ese paso del extremo al lateral?
Lo más difícil, al menos para mí, fue cambiar el chip defensivamente. Es donde más noté la diferencia. A veces, casi sin darme cuenta, tiraba para arriba y me olvidaba un poco de quedarme atrás, de la marca. Pero los compañeros me ayudaron muchísimo, eso es muy importante porque si están encima de ti lo vas asimilando y te vas quedando con todo poco a poco.
¿Esa segunda vuelta como lateral en el Lugo ha cambiado su carrera?
Sí. En el momento que me ponen de lateral, al principio tenía mis dudas, pero al final he hecho buenos partidos, la gente en el Lugo estaba contenta conmigo y me dieron esa continuidad que tuve. Y gracias a ese cambio ha cambiado un poco mi vida. El Celta se fijó en mí y es un paso importante en mi carrera.
¿Esperaba dar el salto a Primera después de un solo año en Segunda o le cogió por sorpresa?
Te pilla un poco de sorpresa, pero cuando haces las cosas bien, los equipos se fijan en ti. Tanto yo como el Lugo hicimos las cosas muy bien en muchos momentos. De hecho, hay otros jugadores que si no dan el salto a Primera este año, como he hecho yo, lo harán en el futuro porque son grandes futbolistas.
¿Cómo vive un canterano del Deportivo su fichaje por el Celta?
En primer lugar, estoy tremendamente agradecido al Deportivo por la formación que me dio durante los diez u once años que estuve allí. Pero es una época que acabó. No contaron conmigo y no hay que darle más vueltas. Después, si el Celta se fija en mí no tengo ningún problema en venir porque es dar un paso más en mi carrera futbolística. Estoy supercontento de estar aquí, muy orgulloso, y dejando atrás los fanatismos o rivalidades de los clubes. No es algo que lleve dentro. Soy de Santiago y lo que quiero es que los equipos gallegos triunfen: el Celta, el Dépor, el Lugo, el Racing de Ferrol, el Compos… Todos. Me siento orgulloso de ser gallego y de estar en un club gallego.
¿Considera que el hecho de que, como es su caso, futbolistas que han estado en el Deportivo vengan al Celta o viceversa, algo que por otro lado ha pasado muchas veces con anterioridad, puede contribuir a normalizar las relaciones y a huir de ese fanatismo al que se refiere?
Sí, por supuesto. Hay que verlo como algo normal. Si, como en este caso, el Deportivo no cuenta con un jugador y al Celta le interesa, por qué no se va a ir. Hay que verlo con normalidad y dejar fuera fanatismos.
El Celta tiene laterales consolidados ya como Hugo Mallo o Jonny. Teniendo en cuenta la competencia, ¿qué espera de la temporada en el plano individual?
Espero trabajar para convencer al míster de que no vengo aquí a pasar el rato. Quiero jugar lo máximo posible, pero sé a dónde vengo, los laterales que hay aquí y la competencia que hay. Deseo hacer esta competencia lo más sana posible a base de trabajo y exigencia tanto para ellos como para mí.
¿Y en el plano colectivo cuáles cree que deben ser las metas del Celta?
Creo que tenemos que hacer un buen papel en Europa, porque es algo muy bonito y hace tiempo que el Celta no juega ahí. Y en Liga hay que competir otra vez para estar lo más arriba posible. El equipo lo tenemos. Hay muy buen grupo, muy buenos jugadores, y espero que hagamos un muy buen papel tanto en Europa como en la Liga.
Va a debutar en Primera División y en Europa el mismo año.
Sí, es algo que no pensaba que pudiera pasar hace uno o dos años. Pero estoy aquí y hay que trabajar y disfrutarlo como un niño pequeño, porque es algo muy bonito.
¿Le atrae la filosofía de juego del Celta?
Sí, ese tipo de fútbol que tiene el Celta me gusta. Es un fútbol bonito. Me gusta atacar, que la gente corra, y en este equipo todos lo hacen. Después, con balón, es un equipo alegre, que quiere la pelota, que quiere jugar y que disfruta jugando.
¿Hay algún jugador del Celta que le llame especialmente la atención o que le haya sorprendido en estos primeros días de entrenamientos?
Todavía no están todos, porque faltan los jugadores internacionales, como Orellana, pero de los que hay aquí me han sorprendido mucho tanto Iago como Daniel Wass. A Iago ya se le ve todo lo que hace en el campo, pero a Daniel no lo conocía tanto y me ha sorprendido gratamente. Es muy atrevido, muy completo, y me llama mucho la atención.n
