El muelle deportivo de San Gregorio pide una concesión larga tras 22 años en precario

El muelle deportivo de la asociación náutica San Gregorio ha puesto en marcha una solicitud formal ante la Autoridad Portuaria (APV) para conseguir una concesión administrativa larga, de al menos diez años, en sus instalaciones de pantalanes flotantes en Bouzas. “Llevamos 22 años con renovaciones año tras año, es hora de tener alguna seguridad”, explicaba ayer un responsable de la entidad. El muelle cuenta con capacidad para 77 atraques de embarcaciones de ocho, diez y doce metros, y además sirve de base para la agrupación Remadoira de barcos artesanales y tradicionales, que dispone de ocho a mayores en los pantalanes. En estas condiciones, cuenta con ocupación total todo el año y necesitaría más espacio, pero no va a ser fácil. Su petición a la APV es de mantener los 4.150 metros de la lámina de mar de que dispone y ganar algo de espacio en tierra, hasta 100 metros.

Hasta ahora la Autoridad Portuaria se había limitado a prorrogar el permiso a San Gregorio por una cuestión que resulta evidente: el puerto deportivo se encuentra en la única “ventana” ante la Ría, entre las plantas de dos astilleros, Cardama y Freire, que en algunas ocasiones han señalado que podrían necesitar algo más de espacio. A partir de ahora el Puerto podría abrir la mano al no haber tanta presión de las factorías navales. Al menos, eso es lo que esperan en San Gregorio. La solicitud está en marcha con un mes de exposición pública que ya se ha publicado en el BOE. Si no hay oposición, el consejo de la Autoridad Portuaria podría dar visto bueno en octubre y a partir de ahí la entidad podría realizar más inversiones. La asociación se implantó en la Curva de San Gregorio a principios de siglo y en 2002 colocó los pantalanes y desde entonces, año a año renovando su permiso, lo que supone estar siempre en precario a la hora de realizar inversiones.

Curiosamente, en torno a Bouzas se concentran la mayor parte de los puntos de atraque deportivos de Vigo, donde la demanda ha crecido mucho a lo largo de este siglo, sin apenas plazas disponibles. Además de San Gregorio se encuentra el Liceo -el segundo mayor tras el Náutico- y los muelles de San Francisco y San Miguel, así como la Marina Davila. En Beiramar está en marcha la implantación del puerto deportivo de Guixar, que se traslada a las proximidades del antiguo astillero Barreras, dejando libre algo de espacio que podría utilizarse para la terminal de contenedores, aunque este extremo no está decidido.