Descartan ébola por ahora a un paciente aislado en Vigo

Galicia vivió en las últimas horas su primer caso de sospecha de ébola, que obligó a activar el protocolo y al traslado de un paciente en ambulancia desde A Coruña al hospital Meixoeiro, donde se estrenaba la unidad de aislamiento para estos casos, el personal y los equipos de protección individual.

El resultado del primer análisis, que se conoció a primera hora de la tarde de ayer, ya dio negativo y hoy está previsto que se envíen nuevas muestras al Centro Nacional de Microbiología de Majadahonda para descartar completamente la sospecha de infección por virus de ébola, tal como exige el protocolo. Trabajadores próximos a esta unidad de aislamiento indicaron que posiblemente se trate de malaria. El paciente se encontraba bien ayer, con una vía y con antitérmicos que le habían bajado la fiebre.

Las alarmas saltaron el martes a las tres de la tarde cuando entró un paciente en Urgencias del Complejo Hospitalario de A Coruña con fiebre, vómitos y diarrea, y que acababa de llegar de Guinea-Conakry, un país que todavía no está libre de ébola. Se trata de un varón de 24 años con residencia en A Coruña que nació en Guinea-Conacry, donde estuvo los últimos cinco meses para visitar a su familia dado que ahora está en paro y que regresó a Galicia porque su mujer había dado a luz. Cuarenta y cinco minutos después de su entrada por su propio pie en Urgencias del Complejo Hospitalario de A Coruña ya estaba aislado por la sospecha de ébola y se dio la alerta al servicio de Medicina Preventiva y a la subdirección xeral de Información sobre Salud y Epidemiología del Sergas, que activaron el protocolo y se activó al no poder descartar con seguridad que esta persona hubiera tenido contacto en Guinea con algún enfermo de ébola. Desde el primer momento el Sergas contaba con que las posibilidades de un positivo fuesen mínimas pero actuó "a la defensiva". El traslado a Vigo no se realizó hasta las 9:30 de la mañana de ayer porque tardaron un tiempo en contactar con la familia del paciente en Guinea Conakry y porque optaron por hacer el análisis de sangre en A Coruña para lograr una respuesta más rápida del Centro Nacional de Microbiología. En Vigo los sindicatos achacaron el retraso al hecho de que hubo que "limpiar la habitación, poner la cama y retirar unas cajas que había en el pasillo de la unidad de aislamiento". También se reclutó al personal, algunos de ellos voluntarios, y se anularon las citas para las pruebas de glucemia a embarazadas que se hacen en una zona próxima. El jefe de Medicina Preventiva del Complejo Hospitalario de Vigo, Víctor del Campo, explicó que "no se puede mantener el mismo nivel de alerta permanentemente y actualmente era muy bajo. Recordó que la inicio de la epidemia en 2014 se podían registrar 500 o 600 casos en una semana en esos países de África Occidental, pero que ahora puede haber tres casos a la semana y a veces ninguno. Víctor del Campo compareció ayer ante los medios de comunicación, con el subdirector de Información sobre Salud, Xurxo Hervada, y hoy volverán a dar cuenta de la evolución del caso.