Episodios vigueses
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Faltan primeras marcas de ginebra y whisky en bares y locales de copas de Vigo. Es la crisis global de suministro que sigue extendiéndose y alcanza ahora al sector de la hostelería justo cuando comenzaba a reactivarse tras la pandemia creando tensiones logísticas.
“Está empezando a fallar todo, pero el abastecimiento está garantizado. Si no es de una marca es de otra”, indican desde Almacenes Domínguez, una de las distribuidoras referentes en nuestra ciudad que constata que la entrada de ciertos productos está siendo a cuentagotas. Se refiere a producto importado de Reino Unido que a causa del Brexit se atasca en la aduana. Es el caso de enseñas como ginebras Beefeater o Seagrams o vodka Absolut.
“La ginebra que se sirve desde este país está teniendo muy mal servicio”, dice la compañía que también acusa la escasez de otros productos como vino joven o aceitunas, pero sobre todo de bebidas alcohólicas. En los bares ya están recibiendo avisos desde hace días de que algunas firmas no podrán ser enviadas en las próximas semanas, pero el sector apela a la tranquilidad.
“Hay alternativas, si no es una es otra y no se está produciendo una escasez generalizada de producto sino de algunas marcas concretas que confiemos en que se solvente”, señala José Argibay, socio de locales como Sinatra o La Contenta que recibió aviso de problemas con el transporte por la falta de camioneros.
Efectivamente el colapso en el transporte es uno de los factores de la crisis mundial de suministro, al que suman otros como la escasez de materiales como el vidrio (para fabricar botellas), precintos de aluminio, corcho y cartón para el embalaje y empaquetado; el encarecimiento de las materias primas, de los contenedores de transporte marítimo, de los combustibles y de la luz.
“Todo influye, pero en ningún caso hablamos de carencias generalizadas, sino de una rotura puntual de stock”, apunta Carlos Rodríguez, presidente de Apemer, la asociación provincial que aglutina a establecimientos de ocio nocturno.
En esta misma línea se manifiesta Almacenes Domínguez que, en sus 40 años de actividad con la distribución de bebidas y productos de alimentación, asegura no haber vivido una situación similar a la actual que tiene como consecuencia un alza de los precios y la inflación disparada.
Y así en prácticamente todos los sectores: automoción, transporte, construcción, industria metalúrgica, pesca, textil... Porque hablamos de una crisis global de falta de materias primas y encarecimiento desatada por un desajuste muy importante entre la oferta y la demanda.
Es decir, todo se reactivó a la vez a medida que la situación sanitaria mejoraba y la producción no da abasto porque muchas fábricas aún no están al cien por cien. “Los problemas en la cadena de suministro todavía pueden durar meses”, decía hace unos días la directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC)
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