Episodios vigueses
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Cascos utilizados para la construcción y para la seguridad, ahora también en los colegios. Los alumnos profesores y familias del CEP Celso Emilio Ferreiro, en Coia, acudieron ayer ataviados con cascos, chalecos reflectantes y pancartas para solicitar a la Xunta y el Concello una solución para arreglar las deficiencias que registra el colegio, sobre todo en su tejado. Realizaron una pequeña movilización por la calle y una protesta a las puertas del centro de enseñanza. Continuaron una ‘tradición’ que comenzó el colegio Altamar por el mismo transfondo, por el mal estado de su infraestructura.
“Con el calor está seca, pero la vegetación que hay en el tejado es un gran problema en invierno. Se hace más frondosa y eso compromete la salud de los alumnos que acuden a este centro”, apuntó la presidenta del ANPA del Celso Emilio Ferreiro. El mal estado de la cubierta provocó, en alguna ocasión, la caída de cascotes pero no hubo que lamentar heridos. La protesta llevó a alumnos, familias y profesores a recorrer la Rúa Porriño, una zona “donde las cintas protectoras ya se han convertido en uno más del espacio del colegio”, colocadas en la entrada y laterales del centro, por seguridad. “El mantenimiento es del Concello y el arreglo es de la Xunta. Ahora, se encuentran en ese punto donde se pasan la pelota los unos a los otros y no atienden a las peticiones. Nadie se hace cargo del problema que tenemos y eso compromete a la salud y a la integridad de los niños y profesores”, señaló.
Desde el Concello han movido ficha. El alcalde Abel Caballero anunció ayer que remitió una carta a la Xunta para que comience “de inmediato” las obras de reparación y rehabilitación del tejado del colegio, al asegurar que es competencia directa de la institución autonómica. “Nosotros ya demandamos ese arreglo hace muchísimo tiempo”, señaló el regidor. Apeló directamente al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, a quien señaló como culpable de la “inejecución de esa obra y de atentar contra la educación en Vigo”.
Desde la Xunta, la delegada territorial en Vigo, Ana Ortiz, indicó que el gobierno local incurre en ese centro en una “grave dejación de funciones”, instando a que “se haga cargo de sus responsabilidades” tras un informe técnico que señaló la falta de mantenimiento como principal causa del deterioro de la cubierta. “El mantenimiento anual que debe realizar el Concello de Vigo incluye la limpieza de vegetación y materiales acumulados. No hacerlo acelera el deterioro del tejado”, aseguró Ortiz.
Ante el cruce de acusaciones, los alumnos y profesores del CEP Celso Emilio Ferreiro siguen mostrando su preocupación por un tejado que, literalmente, se cae a pedazos.
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