El camarero atracado en un bar en Vigo: “Lo primero que vi fue la pistola”
Sucesos
Julio, empleado de la cafetería de la calle Zamora donde se produjo un asalto a mano armada, relata cómo todo fue muy rápido, “lo primero que vi fue la pistola”
A pesar de la experiencia sufrida en la madrugada del jueves, Julio se incorporó a su trabajo como camarero con total normalidad, aunque un poco abrumado por la preocupación de sus familiares y clientes. Ese día, cuando se disponía a cerrar la cafetería ‘Nova 80’ en la calle Zamora, en la que se encontraba solo, se vio sorprendido por dos individuos que entraron de pronto en el local. “Lo primero que vi fue la pistola”, explicaba ayer a este periódico.
Eran dos hombres, de unos 35 años de edad, “como dos armarios”, recuerda, y, aunque iban a cara descubierta según relata, “no me dio tiempo casi a verlos, no sería capaz de identificarles, fue todo muy rápido". Uno llevaba un arma.
“Me llevaron hacia el almacén y me dijeron que me tirara al suelo para no verles la cara”, añade. A partir de ahí, todo fue muy rápido, en apenas unos minutos, los dos atracadores cogieron el dinero de la caja y también el de Julio y huyeron rápidamente del local, con algo más de 1.200 euros.
Este camarero muy conocido y apreciado en la cafetería, “es un gran trabajador”, explicaba una clienta, reconoce que en el momento “pasé un mal trago” pero “son cosas que ocurren y estoy perfectamente”.
Él está convencido de que el arma con el que fue apuntado “era real”, y también de que los dos asaltantes eran de nacionalidad colombiana, “conozco muy bien el acento”. Eso sí, aunque apenas le dio tiempo a fijarse en ellos, “estoy seguro de que no les conozco ni les había visto antes”.
Julio prefiere pasar inadvertido, “no por miedo sino porque no quiero generar más preocupación, estoy perfectamente, fui un susto, pero no me hicieron nada”. Desde el principio tuvo claro que “iba a hacer lo que me dijeran, no solo porque llevaban un arma de fuego sino porque eran dos y de complexión fuerte”.
Su jefe, el dueño del local, que no estaba en el momento de los hechos ( a la 1,40 de la madrugada) ratificó que fue un atraco de minutos, después de ver las imágenes de las cámaras de seguridad, y aseguró que lo más importante es que su empleado no sufriera daño alguno, “aunque es una experiencia dura, no todos los días a uno le atracan con una pistola”.
El grupo de Udev de la Policía Nacional continúa investigando los hechos para dar con los atracadores, ya huyeron antes de que pudieran llegar las patrullas.
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