El panorama que está por llegar

Aunque casi cualquier cosa puede pasar, salvo que Sánchez acepte la propuesta de Feijóo (probablemente ni siquiera la habría aprobado aunque fuera él presidente dos años, su apuesta ganadora es otra), en la Xunta se preparan ya para encarar un Frankenstein-2, agravado y esta vez con el BNG a bordo. No era lo esperado en verano en la dirección popular gallega, pero así están las cosas. La apuesta pasaba por una victoria clara del expresidente gallego que llevaría a la convocatoria electoral en Galicia antes de final de año, quizá en octubre o a principios de diciembre, siguiendo la ola victoriosa, en aplicación de una estrategia política clásica que deja la iniciativa en manos del titular del Ejecutivo. En general funciona, como también ha pasado con las generales, donde Sánchez perdió, pero ganó mientras Feijóo ganó pero perdió.

En Galicia todavía podrían darse unas elecciones en diciembre aunque parece poco probable por cuestión de calendario, que no de oportunidad. En el PPdeG han tomado nota del resultado obtenido en julio, bueno por cuanto su extrapolación le daría la mayoría absoluta en las gallegas, donde en general a los populares y al BNG les va mejor y a los socialistas peor. También anotan que ha entrado un nuevo jugador, Sumar, la enésima cara del espacio de izquierda radical, antes con Marea y Podemos, mucho antes con AGE y hace años con Esquerda Unida y PCG. Y, por tanto, más a dividir en el voto, mientras que Vox continúa sin acercarse al 5 por ciento en Galicia. Y además, el PSdeG se encuentra sin líder ni candidato. Y eso no se improvisa de la noche a la mañana.

En el Gobierno gallego atan cabos y consideran que si no puede ser con Feijóo, quizá sí contra Sánchez. Los populares ofrecerán serenidad, centralidad y certezas ante un Ejecutivo que llegaría cargado de hipotecas, bronca y contradicciones, haciendo equilibrios territoriales y legales. Ya puestos, si la deuda se reduce a Cataluña, también tendría que hacerse lo mismo en proporción en Galicia. Nos vamos a entretener.