Las grandes empresas de automoción con capital gallego se reducen a dos

La venta del proveedor de automoción Aludec, de origen vigués, al grupo vasco CIE Automotive reduce a la mínima expresión el número de empresas de automoción de gran tamaño que tienen capital gallego. A día de hoy solo quedarían dos, Copo y Marsan.

Aludec nació en Vigo en 1984 como una pequeña firma de serigrafía y ahora afronta una nueva etapa dejando de ser una empresa familiar para pasar a manos de CIE como uno de los principales fabricantes mundiales de emblemas y anagramas para coches. Tiene su sede central y centro de I+D en Ponte Caldelas, una sede de coordinación y plantas productivas en Minnesota (EE UU) y Puebla (México), así como una red comercial en España, Francia, Alemania, Suecia, Estados Unidos y Japón. Emplea a más de 1.300 personas. Las ventas para este año rondarán los 160 millones de euros.

Su presidente Vicente Villamarín manifestó su satisfacción por la integración de la compañía en un grupo de ámbito mundial, que "sin duda asegura el crecimiento dentro del sector y permite continuar el legado de mi padre, fundador de la empresa en 1984".

CIE anunció en las últimas horas la adquisición del 100% del capital social de la sociedad Aludec por un valor de 200 millones de euros, lo que equivale a aproximadamente 5 veces el resultado bruto de explotación (Ebitda) del año en curso. Con sede en Bilbao, el grupo se dedica a la fabricación de componentes para la automoción. Tiene más de un centenar de centros productivos en Norteamérica, Sudamérica, Europa, Asia y África. En España cuenta con una veintena de centros, tres de ellos en Galicia que son Cie Denat en O Porriño y ACS Ibérica y CIE Galfor en Ourense. Ahora suma Aludec, que deja de ser gallega aunque mantenga sus instalaciones en la provincia de Pontevedra.

Grupo Copo y Marsan se mantienen con capital gallego entre los grandes fabricantes de componentes para la automoción. El primero, con fábricas en O Porriño y Mos, es un grupo familiar que tiene más del 50% de las acciones a través de Copo Inversiones. Abanca y Sodiga -sociedad de capital riesgo de la Xunta- también tienen participación. Se dedica a la fabricación de espuma para los asientos de los coches, apoya cabezas, fundas, moquetas y tejidos para techos, entre otros. Factura más de 200 millones de euros y emplea a algo más de 1.000 personas en las 9 plantas de producción que tiene en España (Galicia y Aragón), Portugal, México, República Checa y Eslovaquia. Sus filiales Copo Ibérica y Copo Galicia están em Mos, al igual que el centro tecnológico, y Componentes de Vehículos de Galicia está en Porriño.

Marsan fue funda en Vigo en 1951 como una empresa familiar y el año pasado llevó a cabo una ampliación de capital a través de la cual dio entrada a un grupo inversor encabezado por el empresario vigués Luis Álvarez-Sestelo, consejero delegado de la tecnológica Optare Solutions. Vigo Activo (sociedad de capital riesgo de Zona Franca) y Xesgalicia (gestor de fondos de capital riesgo de la Xunta) también tienen participación en la compañía. Con sede en el Parque Tecnológico y Logístico, Marsan se dedica a la estampación y recubrimiento de superficies para vehículos. Tiene dos plantas de producción en México y en Portugal.

En el resto de Galicia hay otras empresas de menor tamaño que tienen capital gallego como Precisgal, Hispamoldes, Industrias Proa o Utingal, entre otras. Viza fue una de las últimas que pasó manos foráneas, concretamente al grupo canadiense Magna, y la viguesa Maviva pasó ser controlada por Ferrovial.