Giráldez: “La temporada nos enseña que hay que ser estables”

El Celta recibe al Bolonia con dualidad de sentimientos en precedentes: la derrota en Bulgaria de la última cita europea ante el Ludogorets y la sonada victoria liguera en el Bernabéu ante el Real Madrid. Claudio Giráldez, técnico celeste, prefiere aplicar el equilibrio. “La temporada nos enseña que tenemos que estar estables. Pasar la resaca de ganar y la de perder y focalizarnos rápidamente en lo que tenemos delante. Los antecedentes de no estar al cien por cien ayudan”, señaló. “Hay cosas muy buenas en el Bernabéu -prosiguió-, donde todo se magnifica, y cosas no tan buenas, que minimizamos, cuando otros días damos más importancia a lo malo que a lo bueno. Tenemos que valorar lo que hacemos bien y mal con objetividad, más allá de escenario y resultado”.

Porque, de un lado, “queda lejísimos lo de Ludogorets. Queremos hacer un partido igual de bueno que los dos anteriores en casa en esta competición: inteligentes y capaces de competir y acelerar muchas situaciones del juego, que es algo que nos faltó en casa en Liga porque los rivales te defienden distinto”. Balaídos sólo ha visto triunfos europeos hasta la fecha: “En Liga hemos sido merecedores de más puntos por las sensaciones, por el juego. Hay una parte que no es casualidad y otra parte derivada de que no hemos tenido el acierto necesario”. Y por otro lado, está aún reciente el alegrón de ganar al Real Madrid. Por eso, Giráldez receta “aprovechar la inercia del Bernabéu pera tener la confianza en las nubes y hacer un partido alegre y atrevido”.

Enfrente estará el Bolonia, que no es ‘peccata minuta’. “Es un rival muy exigente, que está a seis puntos del liderato en la Serie A, que ha ganado la Copa, que ha jugado Liga de Campeones el año pasado y que tiene un potencial ofensivo brutal. Te defiende a pares y tenemos que estar muy serios. Ha ganado a los grandes de Italia, con una manera de jugar muy incómoda”, define el responsable del banquillo celeste. Lo expuesto obligará a “estar muy fino, muy inteligente, en cómo salir de los pares. Muy certero en lo técnico. Y ser capaces de dañar y amenazar. Además, disponen de mucho talento arriba, en especial en los extremos, con jugadores determinantes de los más talentosos de la competición”.

Esa defensa al hombre que en momentos de la temporada se la ha atragantado al Celta ya no parece tal kriptonita. “El equipo ha evolucionado y hemos cambiado el sistema en muchos partidos. El otro día en el Bernabéu, es determinante volver a jugar de tres y que el rival no tenga tan claro esos pares porque venimos de jugar de cuatro. También hay más coordinación entre jugadores que llevan menos partidos entre nosotros”, analizó Giráldez. Con todo, el porriñés no quiere dar tanta importancia a este aspecto. “Cuando no hemos logrado un buen resultado, hemos hecho buenos partidos contra pares. Ha habido días que no, como Stuttgart. Tenemos capacidad de hacer daño cuando nos defienden a pares y cuando no. Y partidos que nos interesan que hagan pares y otros en que preferimos que no”, refrendó.

De momento, toca afrontar Bolonia, sin pensar demasiado en el palizón del pasado domingo y en el que espera el próximo ante el Athletic. “Coinciden miuras en lo físico. Son tres partidos muy exigentes, pero tenemos la capacidad para competir contra Bolonia y Athletic y queremos demostrarlo en el terreno de juego”, valoró el porriñés.

El entrenador no duda del factor ambiental. “Se ha visto un ambiente espectacular en todos los partidos. Europa tiene magnitud distinta porque no se vive todos los años. Nos hemos aprovechado todos de esa magia de disfrutar de una competicion europea en Balaidos”, afirmó. Y rechazó ser clave con sus mensajes a los futbolistas: “No soy tan importante yo, ni lo que pase alrededor. Me alegro mucho por ellos y tienen todo el mérito de lo que acontenció ante el Madrid”. De hecho, no se para a pensar si ese su primer triunfo ante uno de los grandes es trascendente en su carrera: “Contra este tipo de rivales todos los entrenadores perdemos más que ganamos. Hemos competido muy bien en todos los partidos contra ellos. Nos alegra poder ganar pero yo creía que podíamos ganar cada encuentro”. Además, refrendó que “siempre” ha sentido el cariño de la afición y no sólo ahora que se multiplican los halagos.