El Celta aplaza el sueño europeo en las áreas

El Celta tendrá que esperar a la última jornada de Liga, en la que visitará a un Getafe ya salvado, para certificar su clasificación europea después de perder ayer en Balaídos ante el Rayo Vallecano un partido en el que le faltó contundencia en las dos áreas. El equipo vigués se adelantó en el marcador a los diez minutos con un gol de Marcos Alonso, pero dos despistes defensivos, en los que estuvo implicado el propio central madrileño, permitieron a los visitantes dar la vuelta al marcador y los celestes no consiguieron materializar su reacción en la segunda parte.

En un Balaídos con lleno absoluto y con el ambiente de las grandes ocasiones, vigueses y madrileños mostraron desde el pitido inicial la ambición que los ha convertido en las revelaciones de la temporada en Primera División y a los 30 segundos ya se habían producido dos ataques, uno por bando, y un córner a favor de los locales. Un comienzo trepidante que se prolongó para el Celta porque, a los ocho minutos, Mingueza se desplazó a la banda izquierda y envió un pase al área para Swedberg, que sacó un disparo que pegó en el brazo extendido de Lejeune. El árbitro Pulido Santana no dudó y señaló un penalti a favor del conjunto celeste que Marcos Alonso convirtió en el 1-0 engañando a Batalla con un precioso lanzamiento al estilo Panenka.

Sin embargo, la ventaja en el marcador no se reflejaba en el campo porque el Rayo, pegajoso sin balón y preciso con la pelota, se fue haciendo con el control del juego. Y en el minuto 17, los visitantes aprovecharon el primer despiste defensivo de la zaga local para empatar. Pacha Espino envió un centro al área, a la espalda de Marcos Alonso, y por allí apareció Isi Palazón para anotar el 1-1 de cabeza con sus 169 centímetros, frente a los 189 del central madrileño.

La lucha por el balón pasó a ser feroz a partir de ese momento, pero las ocasiones brillaron por su ausencia hasta que, en el añadido de la primera mitad, el Rayo dio la vuelta al marcador en otro error defensivo local. Esta vez fue Lejeune el que mandó el balón al área desde la izquierda y De Frutos aprovechó el agujero dejado por Yoel Lago y Marcos Alonso en el corazón del área para controlar el balón, quebrar al central canterano y batir a Guaita.

Claudio Giráldez no hizo ningún cambio en el descanso, pero el partido cambió por completo porque los celestes entraron mucho más agresivos al campo frente a un rival algo más contemplativo y que fue retrocediendo hasta acabar metido en su área.

Nada más empezar, Williot Swedberg avanzó metros con potencia y cedió la pelota al borde del área a Pablo Durán, que se las arregló para sacar un remate forzado. Batalla rechazó y el balón llegó a Fer López, que estrelló el balón en el Pacha Espino. Poco después, Swedberg culminó una buena jugada de Ristic con un disparo cruzado que se fue del campo rozando el poste.

El Celta recuperaba con facilidad y tenía al Rayo contra las cuerdas cuando el técnico visitante, Íñigo Pérez, hizo un triple cambio que empezó a modificar las cosas, aunque muy poco a poco. Porque los vigueses mantenían el dominio y Pablo Durán reclamó un posible penalti tras caer en el área ante Pathé Ciss y una acción de Ilaix terminó con un remate de Marcos Alonso y un nuevo córner.

Claudio esperó al minuto 69 para realizar el primer cambio y metió a Iago Aspas en lugar de Fer López, pero el moañés no pudo ser en esta ocasión el factor desequilibrante de otras ocasiones.

El Rayo se fue quitando la presión a medida que flaqueaban las fuerzas en el cuadro celeste y, a diez del final, el técnico porriñés refrescó el ataque con Hugo Álvarez y Alfon, que sustituyeron a Ristic y Swedberg. Después, entraron también Carlos Domínguez por un renqueante Marcos Alonso y Borja Iglesias por Pablo Durán.

El Celta se preparó para el asalto final y Javi Rodríguez tuvo el empate en el 95 tras un remate de Beltrán que rechazó Batalla y que el central de Poio cabeceó a gol, pero la pelota golpeó en la coleta de Pathé Ciss y fue directa a las manos del portero. El Celta intentará cumplir su sueño europeo el próximo fin de semana en Getafe.

Celta-Rayo Vallecano (1-2)

Celta:

Guaita; Javi Rodríguez, Yoel Lago, Marcos Alonso (Carlos Domínguez, min.84), Ristic (Hugo Álvarez, min.80); Mingueza, Beltrán, Ilaix Moriba; Fer López (Aspas, min.69), Pablo Durán (Borja Iglesias, min.84) y Swedberg (Alfon, min.80).

Rayo Vallecano:

Batalla; Balliu, Lejeune, Pathé Ciss, Pacha Espino (Chavarría, min.61); Andrei, Unai López, Óscar Valentín (Álvaro García, min.60), Embarba (Gumbau, min.61) ; Isi y De Frutos (Trejo, min.88).

Goles:

1-0, min.10: Marcos Alonso, de penalti; 1-1, min.18: Isi; 1-2, min.45+2: De Frutos.

Árbitro:

Pulido Santana (Comité canario). Amonestó a los locales Marcos Alonso y Yoel Lago, y a los visitantes Álvaro García, Lejeune y Pathé Ciss.

Incidencias:

Partido de la 37ª y penúltima jornada de Liga, disputado en Balaídos ante 21.482 espectadores.