Música

Los primeros músicos Erasmus de A Miñoca, rumbo a Suecia

Candela, Andrea y Helena vivirán durante 8 días su experiencia Erasmus en la ciudad sueca de Uppsala.
photo_camera Candela, Andrea y Helena vivirán durante 8 días su experiencia Erasmus en la ciudad sueca de Uppsala.
El Conservatorio Profesional estrena este mes de abril su programa de intercambio de alumnos tras varias experiencias positivas con profesores en los últimos años

Candela, Andrea y Helena son los tres primeros estudiantes del Conservatorio Profesional de Vigo en disfrutar de una experiencia Erasmus. Fueron elegidos en un riguroso proceso de selección para el que hubo una elevadísima demanda ya que era la primera vez que este centro abría una convocatoria para alumnos a pesar de que ya llevan 4 años con experiencias de intercambio entre docentes. El día 8 de abril partirán hacia la ciudad sueca de Uppsala, donde pasarán 8 días aprendiendo con sus homónimos de la Uppsala kulturskola.

Para Candela, de 18 años y estudiante de saxofón, será su primera experiencia de intercambio en el extranjero. Señala que “nos han dado un horario muy completo y tiene muy buena pinta” y apunta que “sobre todo, quiero saber cómo funciona el conservatorio allí”. Su compañera Helena, de 17 y alumna de piano, se apuntó porque “como es mi último año aquí me parecía una oportunidad maravillosa”, y además ya contaba con experiencias previas como el programa Vigo en Inglés. Por su parte, Andrea, italiano de 43 años afincado en Vigo y que de hecho recaló hace ya dos décadas en España gracias al programa Erasmus, apunta que “me llama mucho la idea de ver cómo lo que hago aquí –Andrea estudia guitarra clásica– se hace en un contexto cultural diferente”.

 

 

Pese a sus diferencias, los tres comparten inquietudes, ya que planean aprovechar todo lo que vivirán en este viaje de estudios en herramientas que les sirvan de cara a su futuro. “Quiero ver todo lo que hay allí y cómo lo enseñan. Ya sólo dentro de nuestro conservatorio tenemos profes distintos y cada uno tiene una forma diferente de dar clase, así que con salir un poco al exterior ya puedes aprender otras muchas perspectivas”, explica Candela. Aunque Andrea ya se dedica a la enseñanza, estudia en el conservatorio “para tener formación y un título que me habilitar mejor para enseñar música”, por lo que espera de su experiencia en Uppsala “conocer diferentes dinámicas de aprendizaje en una cultura tan diferente como la escandinava”. Elena, por su parte, destaca una de las actividades que harán durante su estancia en Suecia: ver cómo funciona el Sistema –un progama público de educación musical importado de Venezuela que pone el foco en la música como instrumento de integración social en los barrios más desfavorecidos–. “Me parece muy interesante conocer otras culturas y ver sobre todo cómo aplican este Sistema en Suecia”.

Tras esta experiencia, el próximo reto del Conservatorio Profesional será traer alumnos de otras latitudes. La coordinadora Erasmus del centro, Sara Peral, confirma que “se está trabajando en ello”, pero que son trámites complicados.

“Voy a poner todo de mi parte para dedicarme a la música”

Además de compartir clases e inquietudes, Candela, Andrea y Helena tienen muy claro que los tres quieren dedicarse a la música y, en particular, a la docencia. 

Candela comenta que se dio cuenta de que esta era su vocación “cuando empecé en el Conservatorio y veía que se me daba bien y que me encantaba subirme a un escenario y tocar”. Además, el ambiente enriquecedor y el hecho de pasar cada año más tiempo rodeado de músicos contribuyó a que tomara esta decisión. “La música en España no está en las mejores condiciones, pero sí que me gustaría dedicarme a ello. Veo a mis profesores, cómo les gusta enseñar y yo quiero eso. Voy a poner todo de mi parte para ello”, indica.

Su compañero Andrea ya se dedica a la música como profesor de guitarra clásica y cuenta que lo es gracias al profesor que tuvo a los 13 años, “que en una época sin Spotify ni nada de esto me pasaba muchas cintas con todo tipo de música”. “Aunque me costó al principio –ser uno de los alumnos ‘mayores’– estoy muy a gusto aquí y he establecido una buena relación con mis compañeros”, añade.

Por su parte, Helena empezó en la música con apenas 3 años pero no decidió hasta el pasado verano que quería dedicarse profesionalmente a ella: “Estoy haciendo el conservatorio a la vez que el bachillerato y al comparar las dos cosas me di cuenta que estaba mucho más cómoda aquí y disfrutando un montón de lo que hago”.

Te puede interesar