Las viviendas destinadas a tal fin ascendieron en el último mes a 1.672 alojamientos, 112 más que en enero
La irrupción de la vivienda de uso turístico (VUT) en Vigo sigue trayendo polémica. Asociaciones del sector de la hotelería se reunirán durante esta semana para poner sobre la mesa cinco propuestas de importancia para la ciudad. Entre ellas una en especial la limitación de las zonas destinadas a ello. La creciente oferta en la ciudad de pisos turísticos, unido a los pocos alojamientos destinados para el alquiler (apenas 450) hizo que en un periodo de dos años el coste de arrendar una vivienda aumentó hasta un 40% y la oferta cayese un 20%. Por ello, el sector pretende con esta reunión sacar conclusiones y concienciar sobre una posible regularización que, en palabras de Iván Sánchez, presidente de la Asociación de la Hostelería de Vigo (Ahosvi), “será muy positiva pero no solo para los hoteles, sino para toda la ciudad”.
Además de limitar las zonas también se pretende proponer lo propio con los establecimientos, sin sobrepasar un cierto número para que coexistan con los demás elementos de alojamiento en Vigo. Otro de los puntos a tratar será el que se destine en su totalidad edificios enteros para ello, y no pisos esporádicos por toda la ciudad. Pero la más llamativa devolvería a sus inicios el objetivo principal de la vivienda turística, según apunta Sánchez, con la presencia del arrendatario en el mismo piso alojado para el que se destina el alquiler turístico. En definitiva, la cesión de la vivienda habitual con el dueño alojado. Esto evitaría que se formasen en la ciudad grandes tenedores, aglutinando varias edificaciones en Vigo.
Todo ello en un contexto donde los pisos turísticos siguen al alza. En febrero de 2024 ya se contabilizan 1.672 alojamientos, 112 más que el anterior mes. El impulso del turismo en la ciudad, sobre todo en agosto y diciembre, ha hecho que las viviendas vacacionales se disparen mes a mes y la elevada demanda existente hace prever que se alcancen las 2.000 a finales del segundo trimestre de 2024.
Las plazas disponibles es otra de las diferencias entre hoteles y pisos turísticos que preocupa al segundo sector. Si bien Vigo cuenta con 48 hoteles para su alojamiento y 4.805 plazas en ellos, los pisos turísticos vigueses pueden llegar a albergar hasta casi 26.000 visitantes en su totalidad, con una media de casi seis por hogar. Algunos incluso superan los 12 o los 14. Esto hace que los VUT dispongan de seis veces más capacidad de ocupación que los propios hoteles. Resaltar la zona centro, el Paseo de Alfonso XII o Elduayen, aunque está extendido por toda la ciudad, hasta las zonas costeras de Canido o Alcabre.
La reciente declaración del Concello de Vigo sobre la posibilidad de catalogar diversos puntos de la ciudad como mercado tensionado no afectará en demasía a los pisos vacacionales. De hecho, cabe la posibilidad de que los alquileres tradicionales, debido a las limitaciones, se pasen al alquiler vacacional, menos regulado. La nueva Ley de Vivienda no contempla una regulación para este caso. Desde el país vecino se cuenta con un ejemplo. El año pasado se reguló el alquiler vacacional con una serie de obligaciones a los tenedores, como un 15% de impuesto extraordinario a abonar o que la comunidad de vecinos pueda vetar su uso.
Más alquiler vacacional que Pontevedra y Santiago juntas
Vigo es, de las grandes ciudades de Galicia, la que cuenta con más pisos destinados al alquiler vacacional. Salvo Sanxenxo, la ciudad se sitúa en segunda posición con 1.672 viviendas, seguida de A Coruña (1.237), Santiago (822) o Pontevedra (465). Estas cifras hacen que si suman los pisos turísticos de Pontevedra o Santiago no alcanzan a Vigo. Ourense, con 382 viviendas y Lugo, con 269, completan los datos de las grandes ciudades. Las cifras, lejos de reducirse, han ido aumentando en un corto espacio de tiempo. Santiago en el mes de enero contaba con 800, Pontevedra con 454 o A Coruña, con 1.137.
