La contratación de un sistema de control de aforo, tiene un importe de 46.200 euros. Los dispositivos no graban ni imagen ni sonido, solo definen perfiles; es decir, traducen siluetas en datos. A partir de ahí, establecidos los aforos de los espacios, si las cámaras detectan que se sobrepasan o hay una concentración de personas sin distancias de seguridad, se activa una alarma y se da aviso a controladores presenciales. Este sistema estará conectado también con la Policía Local, que actuará si fuera preciso.
La zona controlada es de unas 60 calles: Casco Vello (Praza da Constitución, Praza da Piedra, Colegiata); Policarpo Sanz, Príncipe, Urzáiz, Rosalía de Castro, Porta do Sol y calles adyacentes (López de Neira, Velázquez Moreno, García Barbón). n
