Activismo como alternativa para concienciar a los jóvenes

Jaira Maribel imparte una charla durante su estancia en la provincia pontevedresa.
photo_camera Jaira Maribel imparte una charla durante su estancia en la provincia pontevedresa.
Dos mujeres hondureñas visitan Vigo en un proyecto educativo para dar a conocer su realidad y lucha en un país conflictivo

El activismo en Honduras puede resultar peligroso y criminalizado. Así lo indican Jaira Maribel Castillo y María Esther Ayala, dos mujeres muy involucradas en la defensa de su país en temas como el feminismo, la preservación de la cultura y el mantenimiento del rural. Visitan Vigo mañana, concretamente el IES Valladares, para ofrecer a los alumnos de secundaria su realidad de primera mano en el proyecto “Activistas por el mundo” que, lejos de ser una tarea sencilla, en los casos más graves, puede condenar a un castigo ejemplar por parte de gobiernos dictatoriales. Con ello pretenden inspiran al alumnado a tomar conciencia de su realidad, en un tiempo donde se marca su desarrollo social y personal. 

María Esther Ayala, licenciada en ciencias jurídicas y defensora de los derechos humanos, es trabajadora en el Centro de Derechos de las Mujeres (CDM), una organización feminista que lleva más de treinta años luchando por los derechos laborales, sociales y reproductivos de las mujeres en Honduras. “Hay serias dificultades en mi país por culpa de los gobiernos existentes desde 2009, donde se intensificó la violencia”, admitió Ayala, que vio como muchos amigos de su cooperativa “fueron criminalizados, perseguidos y, el algunos casos, asesinados”. 

Las charlas que llevan realizando desde el pasado miércoles en la provincia tienen un objetivo: “Dar a conocer cómo vivimos, nuestra defensa de los derechos humanos y que los jóvenes de aquí tomen conciencia de ello porque aquí tienen una situación de privilegio”. Asumió que la realidad de los adolescences a los que les imparten estas charlas todavía tiene mucho margen de mejora porque “tal vez no se reconoce lo que se consiguió, y que fue gracias a la lucha de sus antepasados". Todo ello explicado con ejemplos prácticos, para que no se tolere ciertos comportamientos de las autoridades como sí sucede en Honduras: “Las canteras de extracción de mineral en mi país están totalmente vendidas, y se escudan en la generación de riqueza cuando la población no se beneficia de ello. Ahí es cuando queda un país vendido”. 

Jaira Maribel Castillo, por su parte, reconoció que durante las primeras charlas impartidas en la provincia “los niños, aunque tímidos, están con mucha curiosidad e intriga. Al final sienten empatía y comprenden nuestras realidades”. Una vivencia que a la activista le llevó a perder a uno de los líderes de su organización Unión de Trabajadores del Campo (UTC), Félix Vasquez, que fue asesinado en 2020 “porque a los políticos de Honduras les estorbamos”. No obstante, aseguró que la criminalidad “está descendiendo, ahora ya se puede realizar manifestaciones pacíficas y la gente ahora tiene esperanza”. 

Castillo, originaria del pueblo lenca, agradece estas iniciativas donde pueden concienciar a otras culturas que, aunque distintas, tienen problemas semejantes: “queremos una defensa de la tierra, tanto en Honduras como en cualquier parte del mundo”. Esta es la décima edición del proyecto que, en años anteriores, llegó a casi 4.000 jóvenes de toda Galicia a través del trabajo de las ONG.

Te puede interesar