La meteorología le complicó las cosas a la tercera y última edición de la Festa da Arribada de Baiona, sobre todo y teniendo en cuenta la afluencia desmesurada de gente que no quiso perderse el día fuerte de fiesta. Con todo la mañana de ayer domingo discurrió fluida entre gotas que a mediodía se volvieron un poco más intensas. Sin embargo y contra todo pronóstico la lluvia por la tarde perdonó y el programa se desarrolló sin problemas.
Las zonas gastro gozaron de bastante público, las bolsas de mesas estaban llenas y los puestos de los gremios también. En las calles del casco la afluencia fue un poco más floja y en puntos como Ventura Misa los paraguas lo invadían todo a primera hora. Las primeras en resentirse fueron las actividades al aire libre, el parque temático infantil instalado por segundo año en el Parque de A Palma amaneció desierto y horas después retomó el ritmo, los artesanos se las ingeniaron para aguantar todo el día, al igual que los herreros, canteros y los puntos de venta de comida. Las representaciones de la playa de Ribeira se sacaron adelante durante la mañana aunque con los graderíos al 50% y poco público fuera del mismo. El balance obtenido en términos generales fue muy bueno, este viernes la asistencia superó con creces a la de 2022, el sábado se convirtió en una auténtica locura y el domingo resistió. Los encargados de la animación también cumplieron, Troula volvió a desfilar con sus zancudos y los gaiteiros, sin embargo, tuvieron que resguardarse en unos soportales paralizando su pasacalles por un chaparrón. Para el alcalde Carlos Gómez los resultados obtenidos en la presente edición son de récord destacando el salto cualitativo en la gestión de espacios, reorientada como un evento de tipo familiar y donde los más pequeños tienen un hueco. “Hemos dado una vuelta de tuerca la una fiesta que está catalogada de Interés Turístico Internacional”, explica el regidor, que según adelantó ya están trabajando en aspectos mejorables para la cita de 2024.
El buque insignia de las celebraciones en la villa no se deja amedrentar por el mal tiempo, el viaje de 530 años en el tiempo para rememorar la noticia del Descubrimiento resistió con el mercurio rondando los 10 grados, chubascos esporádicos y con la tranquilidad de haber disfrutado de un sábado que reventó las expectativas.
‘La Arribada del Descubrimiento’ se salva de la suspensión
Los espectáculos representados desde playa Ribeira se desarrollaron al completo con un ojo puesto en el cielo y justo al inicio de la obra “La Arribada del Descubrimiento” comenzaron a caer unas gotas que afortunadamente no fueron a más. La creación de Avelino Sierra dirigida por Mónica Sueiro siguió adelante sin interrupciones y edición tras edición escenifica la llegada hace 530 años de Martín Alonso Pinzón tras fondear frente al arenal, acompañado de Rodrigo de Triana, el primer tripulante en avistar en travesía el continente americano a las 2 de la madrugada del 12 de octubre de 1492, y el piloto de “La Pinta”, el baionés Cristóbal García Sarmiento, que es recibido por su mujer y sus tres hijas.
Tras acreditar sus identidades comienzan un intercambio de palabras teatralizado con el corregidor de la villa y acto seguido un chinchorro toma tierra con lo que parecen tres indígenas, uno de ellos moribundo, y productos por aquel entonces exóticos como la patata o el tabaco, además de oro. También narra la tormenta que casi los lleva pique y que deja a la embarcación hecha trizas.
El pase de ayer domingo finalmente consiguió reunir a cientos de personas distribuidas por las butacas de la playa y por el paseo como el último de los platos fuertes de esta edición. Poco después de empezar los zancudos volvieron a salir por las calles de la localidad y los encargados de cerrar la Festa da Arribada 2023 fueron “Bloquinho Aperta” a ritmo de timbales, dobladas, cortadores, repiques, cajas y fondos.
La jornada de ayer domingo discurrió sin incidentes, tampoco se registraron retenciones ni aglomeraciones. Los dispositivos de seguridad respondieron según lo previsto hasta las 22 horas, cuando llegó el momento de dar carpetazo y despedir la fiesta hasta el próximo año.
