Luz verde al tercer parque de un complejo eólico de Valdeorras

El parque eólico Xeada será una realidad. El Diario Oficial de Galicia publicó ayer las autorizaciones administrativa previa y de construcción del proyecto, que afecta a los concellos de A Rúa y Vilamartín, así como al municipio lucense de Quiroga. De este modo, la Xunta da vía libre a la tercera pieza de un complejo de parques eólicos próximos entre sí, y que sumarán una potencia de 64,8 megavatios (MW).

La autorización otorgada a este proyecto permitirá instalar tres aerogeneradores de 220 metros de altura, cada uno con una capacidad de producción de 6,6 MW. En total, el parque tendrá una potencia instalada de 19,8 MW. El presupuesto necesario para acometer las obras asciende a casi 27,6 millones de euros, además de la fianza de más de 230.000 euros que deberá abonar la empresa promotora para comenzar a transformar la zona.

El parque autorizado se situará en la Serra do Cereixido, en la divisoria entre Valdeorras y Lugo y a escasa distancia de la Serra do Courel. Concretamente, en las proximidades de las parroquias vilamartinesas de San Vicente y Cernego.

El proyecto actual, que consistirá en tres aerogeneradores, es fruto de los recortes del planteamiento inicial. En un principio se contemplaba instalar cinco, con una potencia total de 33 MW. Sin embargo, debieron eliminarse dos molinos para poder superar los trámites ambientales. Según recogen los documentos publicados ayer, el parque Xeada tiene derechos de acceso y conexión a la red eléctrica por una potencia de 50 MW.

Fraccionamiento

El parque Xeada es una de las tres piezas de un complejo que suma otros dos proyectos: Orballeira y Neboada. Los tres comparten servicios y dependen de la subestación de este último, como así lo ha reconocido la Administración autonómica en sus distintos informes ambientales.

Las empresas promotoras de los tres parques -Neiva Directorship, Sinagra Investments y Maia Directorship, respectivamente- están vinculadas, y guardan relación con una familia de empresarios baleares: los Mascaró. El denominador común de las tres es que su administrador único es la sociedad limitada Directorship Cibeles, además de que tienen registrado como representante a Bruno Mascaró Rubert y, como administrador mancomunado, la sociedad limitada Vega 2002, propiedad de la misma familia.

La estrecha relación y proximidad de los tres parques levantó sospechas de que se trataba de un fraccionamiento artificial de un macroparque. Los proyectos superiores a 50 MW deben tramitarse por vía estatal, desarrollando un proceso, en principio, más complejo. Siendo tres parques que no superaban el umbral, el papeleo pudo hacerse en Santiago.