Vigo concentra la construcción de los barcos científicos más punteros

El “Sarmiento de Gamboa”, del CSIC, también con base en Vigo y obra del astillero Freire.
photo_camera El “Sarmiento de Gamboa”, del CSIC, también con base en Vigo y obra del astillero Freire.
La mayor parte de la flota del CSIC, del IEO y de la Secretaría de Pesca, construida en astilleros vigueses y con base en Vigo. Armón y Freire optan a construir el mayor  oceanográfico

El  barco vigués “Ramón Margalef”  es espectador privilegiado del avance de la lava en La Palma. Sus científicos trabajan a contrarreloj, igual que lo hicieron en 2011 con la erupción volcánica en El Hierro. Es el buque científico más moderno de España y uno de los primeros de Europa, se construyó en Vigo en el astillero Armón y tiene puerto base en la ciudad, como la gran mayoría de la flota del Instituto Español de Oceanografía (IEO), del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la Secretaría General de Pesca que colocan a Vigo en lo más alto en construcción de laboratorios flotantes.

El “Margalef” cuenta con una sonda biológica capaz de analizar la topografía del fondo marino en tres dimensiones (3D) y puede recoger muestras de hasta 4.000 metros de profundidad. Su barco gemelo es el “Ángeles Alvariño”, también hecho por Armón, que hace unos meses  participó en la búsqueda en el mar de las niñas Anna y Olivia en Tenerife con su radar de barrido lateral y un robot marino que permitieron recuperar el cuerpo de la mayor.

El IEO tiene otro barco, el “José María Navaz”, con puerto base en Vigo, con lo que cinco de sus tres oceanográficos parten de la ciudad en sus misiones oceanográficas a nivel nacional e internacional.

Otro astillero de referencia en la construcción de este tipo de barcos es Freire y suyo es el “Sarmiento de Gamboa”, del CSIC, el primer barco científico español que puede trabajar con vehículos autónomos submarinos a grandes profundidades. Desde 2007 suma cerca de 80 misiones de gran relevancia como el volcán Etna en Italia o la colisión entre los continentes de Europa, Asia y África.

La flota de investigación pesquera de la Secretaría General de Pesca es toda ‘made in’ Vigo, fabricada en su día por el extinto astillero M.Cíes. Son los barcos  “Miguel Oliver”, “Vizconde de Eza” y el “Emma Bardán”, todos con base en el puerto vigués.

Son precisamente este tipo de buques, junto con los pesqueros, con los que el naval vigués capea la crisis que azota al sector, en mínimos históricos.

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