El Rápido de Bouzas ofreció ayer una rueda de prensa en la que se estrenó como interlocutor Imanol Almudí para dar a conocer que Alfonso Caneiro, el presidente dimitido en febrero, continúa al frente de la entidad y que la entidad realizará una auditoría económica debido a que “en noviembre la Agencia Tributaria embarga las cuentas bancarias del club” y, de esa forma, se produce un “inesperado quebranto económico”.
Esta es la principal novedad en una comparecencia sin demasiadas novedades en la que el nuevo portavoz del club reiteró que la asamblea extraordinaria prevista para esta semana queda anulada y que, con buenas palabras, la opción de abrir el club a nuevos socios no está prevista en el corto plazo. Como tampoco es probable la realización de elecciones, ya que Almudí pidió “recuperar la tranquilidad en la entidad para poder terminar la temporada”.
En varias ocasiones repitió que este es el objetivo de la junta directiva que “no admitió la dimisión de Alfonso Caneiro porque, de marcharse de la entidad, la situación económica todavía sería peor”.
Además, Almudí expresó que Gustavo Loureiro será el nuevo coordinador de la cantera y que desde ayer comenzaba con las reuniones y reiteró que la entidad tiene los pagos al día salvo “el mes de febrero del primer equipo”, pero que también hay una deuda “con los diferentes proveedores”, que determinarán en los próximos días.
¿Dónde se encuentra el dinero?
Imanol Almudí se quiso extender ayer en la delicada situación económica que vive el Rápido de Bouzas y que, según la junta directiva de la que es portavoz, se genera en noviembre tras ser embargadas las cuentas. Por eso, entiende que se produce un quebrantamiento económico y se hará una auditoría externa para saber por qué se produce y dónde está el dinero.
A partir de ahí, se apuntó a dos exdirectivos, pero sin querer nombrarlos al no tener pruebas y también aseguró que en el caso de la lotería de Navidad “faltaron 9.000 euros, que puso Alfonso Caneiro”. Y, de hecho, admitió que el presidente puso fondos de sus bolsillo en numerosas ocasiones. Por ello, la junta directiva no desea su salida.
