Cartas al director

Colaboración en los desahucios

Según he leído en algunos medios de prensa los Servicios sociales de Barcelona vienen denunciando con insistencia y desde hace algún tiempo que se les obliga a ir a los desahucios para colaborar con la Justicia a fin de hacer más llevadera la ejecución de los desalojos, lo cuál va en contra de sus funciones y su verdadero cometido. Esta misma denuncia la acaban de efectuar una vez más ante la nueva alcaldesa de Barcelona Ada Colau sin que por el momento se les haya eximido al parecer de tal obligación. Los trabajadores sociales dicen que no consideran ético actuar de mediadores cuando no hay una garantía de realojo digno de los que van a ser desahuciados.
La presencia de trabajadores sociales en los desahucios se produce gracias al protocolo firmado hace alrededor de dos años entre el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat y el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. En teoría, se pretende acelerar el contacto entre las personas afectadas por desahucios y los Servicios sociales municipales para evitar riesgos de exclusión. Pero para los trabajadores o educadores de los Servicios sociales se denuncia muy al contrario que dicho acuerdo parece estar pensado más para proteger a los responsables de la comisión judicial que en hacer una atención social preventiva o en proteger un adecuado realojo de los desahuciados. Lo que deja al descubierto el efecto perverso de dicho protocolo.
En este sentido no debemos olvidar que en similares circunstancias se produce la firma del protocolo suscrito por la Xunta de Galicia, la Federación de Municipios y el TSXG, por lo que los Servicios sociales gallegos estarían colaborando supuestamente para facilitar el desalojo de familias afectadas, cuando su verdadero cometido habría que entenderlo más bien en facilitar la ayuda habitacional que precisan estas personas o familias antes de que esta intervención judicial se produzca.