Casino La Toja alquilaría por 25 años los locales que dejaron vacíos las firmas de moda con la vista puesta en captar turismo. El acuerdo, pendiente de ratificación
El Consorcio Zona Franca (CZF) ha decido reorientar el Centro A Laxe del comercio al ocio tras el cierre de dos de las tiendas de moda principales del complejo que ocupaban la planta superior, Adolfo Domínguez y Bimba & Lola, y ante el interés de la empresa Casino La Toja por abrir una sucursal en Vigo. Es una opción que permite el reglamento de actividades de juego aprobado por el Gobierno gallego y ya en vigor. La idea es aprovechar el emplazamiento de A Laxe frente a la Estación Marítima para rentabilizar su posible tirón ante los cruceristas, y también con el turismo convencional durante todo el año. Y por supuesto con los vigueses y visitantes.
Adolfo Domínguez clausuró su negocio a finales de 2017, en tanto que Bimba & Lola lo hizo hace unos días, lo que ha supuesto dejar A Laxe en dificultades y ha llevado a Zona Franca a apostar como alternativa por el ocio, que era la idea original cuando se construyó el complejo dentro del programa urbanístico Abrir Vigo al Mar.
Existe un preacuerdo entre CZF y la firma Cirsa, que gestiona el salón de juegos, para un alquiler por 25 años de los 2.000 metros cuadrados que quedan libres tras la salida de las firmas de moda. Dicho plazo se considera garantía de que se trata de un proyecto a largo plazo e incluso se contempla la posibilidad de extender el contrato por más tiempo.
Cirsa se haría cargo de toda la inversión necesaria para reformar la planta que ocupará y dotarla de los servicios que exige la normativa, en cuanto a accesos, vigilancia y otros aspectos. El preacuerdo es total entre ambas partes pero está supeditado a que la promotora consiga los permisos de actividad y urbanísticos, tanto de la Xunta, a través de la Consellería de Industria, como del Concello de Vigo, mediante la Gerencia municipal de Urbanismo. No va a resultar fácil ni rápido, así que la instalación del casino todavía se demorará durante varios meses, siempre que no haya algún tipo de oposición desde O Grove, como ya ocurrió en el pasado.
