La firma viguesa cumple 13 años de espera por permisos para su proyecto residencial
La empresa viguesa Residencial Monasterio de Oia ha vuelto a chocar contra el mismo muro que obstaculiza el desarrollo del proyecto de reforma del antiguo cenobio de Santa María: la falta de abastecimiento suficiente para dar servicio al complejo y al mismo tiempo a la villa. El asunto quedó pendiente de resolución mediante un estudio de Augas de Galicia y la Universidad de Vigo cuya publicación se ha anunciado en distintas fechas, aplazándose en varias ocasiones el resultado definitivo. No obstante, la empresa ya sabe vía Concello de Oia que los recursos hídricos del municipio resultan por completo insuficientes para atender el centro de salud y un complejo residencial como el proyectado. Así las cosas, la última comunicación remitida a la empresa propietaria es de nuevo del Concello de Oia pidiendo más tiempo y señalando la necesidad de buscar alternativas a través de captaciones de acuíferos en el monte. Tampoco sería fácil, entienden en Residencial Monasterio de Oia, porque exigiría una importante inversión y chocaría probablemente con algunas dificultades en las comunidades de montes o con grupos ecologistas, muy activos en el ayuntamiento. La compañía viguesa compró el monasterio en noviembre de 2004 al Banco Pastor, que había descartado un plan similar. "Llevamos 13 años, cuando nos prometieron en la Xunta que los permisos estarían listos en cuestión de meses, no ha sido así", recordó un portavoz.
Residencial plantea un complejo hotelero compuesto por un Hotel de 4 estrellas con 72 habitaciones y 1.000 metros cuadrados de salones para celebraciones y eventos ubicados en el cenobio y su ampliación. Han diseñado 10.000 metros de zonas verdes, bosques de ribera y parques lúdicos y 150 plazas de aparcamiento exteriores para visitantes y clientes. Se prevé también la ejecución de un centro de talasoterapia anexo y la posibilidad de desarrollar en los terrenos una serie de edificaciones en relación con la trama del lugar.
