“Hubo un error en la operación y para justificarlo me culpan”, alegó el traumatólogo que atendió a Desirée Vila
nnn Durante cerca de cuatro horas de declaración, el traumatólogo Pedro Larrauri, acusado de lesiones por negligencia en el diagnóstico que provocó la amputación de una pierna a una gimnasta del club vigués Flic Flaca, defendió su actuación en el caso.
Larrauri, que se enfrenta a dos años de prisión y cuatro de inhabilitación además de una indemnización millonaria, aseguró con rotundidad que Desiré Vilas “salió de la clínica El Castro con el diagnóstico correcto”. A su juicio, “hubo un error en la operación que le realizaron en Povisa y para justificar el error me culpan a mí”. Así, afirmó que “si esa pierna se opera bien, no se necrosa”. “Yo fui el primero sorprendido y entristecido cuando la madre de la joven me llamó para contármelo”, lamentó.
Desiré Vilas, de entonces 16 años, sufrió un accidente mientras entrenaba, en marzo de 2015. “Yo estaba de traumatólogo de guardia y me llamarón porque había una fractura de peroné, ese fue el diagnóstico del médico de familia y que estaba ingresada. Las lesiones vasculares en estos casos se dan en un porcentaje muy pequeño”.
Aseguró que durante los días que estuvo en la clínica, “no tuve nunca ninguna sospecha de isquemia. Cuando se produce, se dan todos los síntomas, no unos sí y otros no”. Fue en el momento de hacerle la cura, cuando afirmó tener las primeras sospechas de que de que puede haber una lesión arterial, “es entonces cuando solicito un Angio-TAC”. Aunque afirmó que se produjo una obstrucción no fue una isquemia “la circulación colateral era suficiente, había que ponerla en manos del cirujano vascular y yo pedía enviarla a Coruña pero el seguro me dijo que a Povisa” y añadió que “otro cirujano vascular lo hubiera intentado”.n
