Los cruceristas abarrotaron el Casco Vello y la zona comercial de Príncipe rodeados de transeúntes que disfrutaron del buen tiempo paseando por el muelle y el centro
Los cinco mil cruceristas se dispersaron ayer entre los cientos de curiosos que se acercaron hasta el puerto vigués para contemplar de cerca y fotografiarse delante del coloso “Oasis of the seas” mientras los pasajeros se adentraban en el Casco Vello armados con los planos de la ciudad y con el único objetivo de encontrar la zona vieja y las calles comerciales. “Muchos nos preguntan por taxis para irse directamente a Oporto o Lisboa”, señalaban ayer desde la oficina de turismo emplazada delante de la Estación Marítima. Enfrente, la Policía Portuaria repetía incansablemente a los que se acercaban hasta la puerta que no podían visitar el interior del barco.
Mientras tanto, en el Casco Vello, el mercado de A Pedra continuaba cerrado y las principales plazas recibían con música y oficios artesanales a los turistas, muchos de ellos nacionales de visita por Vigo que aprovecharon también para acercarse al muelle para fotografiar el crucero.n
