Con dos meses de diferencia, los canes fallecieron al mojarse en una fuente de O Castro
Dos perros murieron electrocutados este verano en una misma fuente de Vigo, sin que sus dueños recibiesen ninguna explicación oficial del accidente. El 11 de julio, Selva murió al mojarse una pezuña al beber. Este domingo, Súa compartía su suerte al querer bañarse, como tantas veces, en la fuente. Ahora sus propietarios exigirán responsabilidades al Concello vía judicial: “Es increíble que después de lo sucedido en Santiago que acabó con el fallecimiento de una menor, no se hayan tomado medidas”, asegura Alba Sánchez, propietaria de Súa, que se muestra indignada y alarmada, ya que “lo que le pasó a nuestros perros le podría haber pasado a un niño, porque eran animales grandes, de más de 30 kilos”. Sánchez, junto a María y Pedro, dueños de Selva, cuentan con el asesoramiento legal de Cristina: “Contactamos con ella a través de una protectora y nos va a llevar el caso de forma altruista”. La letrada también representó hace un año a la causa de otro can que perdió la vida en Vigo en similares circunstancias al mear en una farola.
Súa (arriba) este domingo. Selva, una chow chow (abajo) falleció en el mismo lugar en julio.
Algo más de dos meses separan ambos accidentes localizados en O Castro, en la fuente bajo la Cruz de los Caídos. Los afectados acusan a los responsables municipales de “imprudencia muy grave” al no tomar medidas tras el primer caso, ya que en su momento, avisaron a la Policía y al Concello.
Con la muerte de la segunda perra, se valló la fuente y electrotécnicos abrieron una investigación de la que aún no se sabe la conclusión. Los primeros resultados de la autopsia de Súa indican que la electrocución como causa probable de la muerte.
