El puerto pesquero vigués ha iniciado el año con un incremento mientras la mayoría de lonjas españolas caen en picado. La división entre lonja y mercado, con cambios en horarios e instalaciones, ha dado resultado positivo. Antes del verano estará terminada la primera ampliación y se proyectan ya nuevos impulsos
n n n O Berbés ya funciona de forma estable dividido en dos partes, la lonja por un lado, con un horario y espacio físico, y el mercado por el otro, con sus propias características. La apuesta de la Autoridad Portuaria contaba con notable oposición en el interior del puerto pesquero y sus miles de usuarios, pero el resultado al menos de momento da la razón a la dirección del Puerto. La prueba está en el primer mes de 2019, que ha servido para tantear cómo van las cosas: en enero, caída en picado de la mayoría de lonjas de España salvo la viguesa, que crece con fuerza, consolidándose aún más como el principal centro de distribución de productos del mar que ya era no sólo en España, sino también en Europa. Normalmente por O Berbés pasa un tercio del fresco de España, pero en enero era más del 40 por ciento.
Ahora por un lado se subasta el pescado en la lonja y por otro se comercializa en el mercado, que funciona como segunda venta, la clave para el despegue del Berbés al concentrar productos que han sido subastados en otras lonjas más pequeñas, y trasladados a Vigo para conseguir mejores precios y amplia distribución.
Desde la Autoridad Portuaria, su presidente, Enrique López Veiga, destaca que ya funcionan de forma estable y sin incidencias ambos lados por separado, confirmando que se trataba de una propuesta adecuada "para la primera lonja de Europa". López Veiga advierte de que el proceso de reforma no se ha dado por finalizado y en estos momentos el Puerto está haciendo obras, modificando para sus usos espacios que hasta ahora tenían otras actividades. Es el caso de la firma Botas, que ya se ha retirado del lugar que ocupaba en O Berbés. Además ya está avanzada la ampliación física del recinto para ampliar el mercado. "Antes del verano estará ampliada la lonja, que va bien, y la prueba es que los usuarios nos piden la ampliación del relleno del pantalán, estamos pendientes de trámites", señala López Veiga. La obra incluye la humanización y el cobertizo en el muelle. El cerco quiere una sala de subastas y unir los dos edificios "para no estar a la intemperie".
