VIGO

“Cuando hace sol la banca te da un paraguas y cuando llueve te lo quita”

Luis Novoa volverá a presentarse el año que viene a presidir la CEP.
photo_camera Luis Novoa volverá a presentarse el año que viene a presidir la CEP.

Luis Novoa es presidente de la CEP desde julio de 2013, cuando sustituyó a José Manuel Fernández Alvariño al marchar a la CEG. Novoa, que también preside Sogarpo, es empresario del sector del metal, preside el Grupo Dafer y es fundador de la CEP. Su mandato acaba en unos meses pero optará a cuatro años más.

Están saliendo algunos datos macroeconómicos positivos pero la recuperación aún no se ve en la calle. ¿Cómo lo ven las empresas?
Ya el año pasado notamos que la economía estaba creciendo, muy despacito. Y este año más, a pesar de que después de una crisis tan prolongada la recuperación no va a ser inmediata, que estamos hablando de crecimiento aún pequeño y hasta que nos acerquemos al 2% la creación de empleo va a ser lenta. Pero no podemos engañarnos, la empresa tiene que ser eficiente porque tiene que competir y para ser competitiva tiene que utilizar los recursos mínimos para su fin y gastar lo mínimo posible. Así que tenemos que olvidarnos de esos planteamientos antiguos de que la empresa tiene que crear empleo, la empresa crea empleo si es eficiente y cuando lo necesita, no está dentro de las obligaciones del empresario. Hay que sacarse de la cabeza maneras de entender la economía que están trasnochadas, no se corresponden con la realidad. Y si no pues vendrán otros que nos sacarán del mercado. 

¿Hay financiación bancaria para las empresas?
La banca se está poniendo las pilas. Algo que yo he dicho muchas veces, lo de decir a la banca no os carguéis el tejido empresarial porque cuando queráis volver a vuestro negocio de dar crédito no tendréis a quién. Pues ya se están quejando de que no tienen a quien. Ahora que tienen liquidez se encuentran que las empresas no piden créditos. Bueno, las empresas que lo necesitan sí, pero pasa que el banco no quiere correr riesgos y no hay negocio sin riesgo. Hay un viejo axioma que dice que cuando hace sol la banca te da un paraguas y cuando llueve te lo quita. Esto no quiere decir que todas las empresas fueran viables en su momento, pero posiblemente un porcentaje bastante alto de empresas que eran viables se quedaron por el camino. Eso es lo que tenía que haber estudiado la banca con espíritu americano, no lo que tienes sino lo que eres. Y no ha ayudado nada tampoco el despegue brutal de los tipos de interés. Una empresa en Europa está financiando entre el 60 y el 70% de su actividad, si esa financiación en lugar de costar entre el 2 y el 3%, incluso el 1,5% en Alemania, llega al 8 o como he visto algún crédito industrial al 12%, mal vamos. Evidentemente en momentos en que los márgenes han desaparecido le metes a la empresa ese diferencial en la financiación y la sacas del mercado. La banca no ha sabido entender la crisis. Hay muchas empresas que no tenían que haber cerrado y lo han hecho por falta de financiación.
El hecho de que haya entidades financieras con sede en Galicia ¿beneficia algo o es indiferente?
Distinguiría entre cajas de ahorros y bancos. Las cajas no tenían dueño, por lo que podían ser en su momento más proclives a mantener un tejido empresarial en una zona, porque detrás no había unos accionistas exigiendo dividendos. En el momento que una caja se convierte en banco, pues es un banco. El que esté radicado aquí le permite conocer más directamente el tejido empresarial y siempre favorece. No es lo mismo que estudie tu crédito una persona que te conoce y sabe quién eres, que una persona que toma las decisiones en Madrid o París y aplica el protocolo. La empresa es algo más, hay intangibles. Eso lo he dicho con el caso Pescanova y en parte la banca lo entendió, que Pescanova siga siendo una unidad y radicada en Vigo. Una empresa no son sólo números, es un know how.

¿Cómo ven los empresarios Abanca?
No va a ser lo que era antes, porque detrás hay unos accionistas que han hecho su inversión y lógicamente quieren un beneficio de su inversión, pero al estar radicada aquí entiendo que a Galicia nos favorece. Lo mismo que nos puede favorecer el Pastor o el Sabadell-Gallego, los que tienen raíces aquí y gestores de aquí. 

La automoción se frena y el naval no termina de arrancar. ¿Qué le está pasando a la industria en Vigo?
Pues le está pasando factura siete años de crisis, de crisis muy dura y financieramente mal gestionada a nivel de España. Esto ha costado muchísimos sacrificios al empresariado, tanto pequeño, como  mediano, como grande. Posiblemente a los grandes, que exportaban mucho, menos. Pero a la pyme nos ha costado un sacrificio tremendo. Si hemos tenido siete años de crisis necesitamos como mínimo siete años de recuperación y además será en dientes de sierra, aunque lo importante es que la tendencia sea a subir. En temas de exportación la pyme tiene mucho que aprender, también es verdad. Hay que salir, hay que viajar. No hay que pensar que vamos a llegar y al día siguiente nos van a comprar. Además tenemos competencias muy desleales, como Oriente. Tenemos que estar compitiendo con salarios de miseria, jornadas que no tienen que ver con las nuestras y cargas sociales que no saben lo que son. Los estándares económicos que estábamos utilizando no valen. Ahora se habla en economía de la inteligencia emocional, la intuición, y gracias a eso pues existe Inditex.

¿Cómo ve a Vigo siete años después?
Empezando a recuperarse y empezando a buscar nichos de mercado y nuevas actividades, sin dejar las antiguas. La conserva sigue siendo puntera, el congelado, el pescado, el sector naval intentando recuperarse y en algunos casos funcionando y la automoción en primera línea. Estos días viene una misión comercial de México donde estuvimos hace cuatro años contándoles qué era Vigo. Nuestra sorpresa es que ya están instaladas ocho empresas de automoción y otras en vías de hacerlo, además de las de logística. Un éxito absoluto. Cuando fuimos no sabían dónde estaba Vigo. 

La CEG ha tenido problemas para sacar adelante los presupuestos. ¿La CEP los va a aprobar?
La CEP votó a favor. La CEG es la representación de las cuatro provincias gallegas en Santiago. Yo soy uno de los fundadores y la creamos porque creímos importante estar cerca de donde se toman las decisiones. Eso no quiere decir que cada provincia tenga su idiosincrasia. La suma de Coruña y Pontevedra somos un 80% del empresariado de Galicia y tenemos que tener una representatividad acorde. José Manuel Fernández Alvariño ahora tiene que tener una visión más global y mi papel es pelear por los intereses  de la provincia de Pontevedra. Eso puede crear roces pero es normal, lo que no es normal es estar de acuerdo en todo.

Y en la CEP pronto habrá elecciones.
Sí porque yo estoy completando el mandato que José Manuel había interrumpido al irse a la CEG. El mandato acaba en abril o mayo. Yo me he comprometido con mis electores a seguir cuatro años más y nada más. Llevo dedicado al asociacionismo más de treinta años y hace falta que venga gente más joven. Pero es difícil porque aquí no se cobra y son un montón de horas. También está la satisfacción del deber cumplido, aunque de vez en cuando tienes que pelearte con las administraciones. La empresa es el pilar, la base. De la riqueza de la empresa nacen todos los impuestos que después la administración administra. Pero a veces tienes la sensación de que el administrador se cree que es él quien crea los puestos de trabajo y el único que lo hace es la empresa. n

Te puede interesar