Interpone un contencioso contra la resolución de Patrimonio que recortó el proyecto
El gobierno de Vigo adjudicó ayer provisionalmente las obras de Gran Vía, con las que se colocarán rampas mecánicas en el bulevar entre María Berdiales y Venezuela, a la UTE integrada por San José y Construcciones Obras y Viales. El proyecto, financiado con fondos europeos, tiene un presupuesto de 5,1 millones y se habían presentado 11 empresas. El plazo de ejecución, cuando la adjudicación sea definitiva, será de 8 meses. El alcalde precisó que las obras empezarán "en unas pocas semanas".
"El señor Feijóo fracasó en paralizarla", aseguró Caballero al anunciar el contrato, y se refirió a la situación en términos futbolísticos como "Vigo 1, Feijóo de nuevo cero".
La humanización supondrá un refuerzo del bulevar central, tendrá acciones de eficiencia energética, nuevos espacios abiertos "y vamos a potenciar la utilización de la Gran Vía y de los bulevares. El intento de Feijóo fracasó", reiteró el regidor.
"Pretendían que esta obra no estuviera hecha en elecciones, una parte importante estará en obras y con fondos europeos. Gratis total para la ciudad", subrayó. Caballero avanzó además que el Concello ha decidido interponer un recurso contencioso contra el acuerdo del 10 mayo 2018 de la dirección de Patrimonio de la Xunta que no autoriza la rehabilitación de los tres tramos de la Gran Vía como estaba previsto. Para el alcalde "es una decisión política porque la arquitecta describe y narra las virtudes de la humanización y viene después la parte política y dice que no lo autoriza. Vamos a ver si no pasan más cosas", advirtió el alcalde. n
