María Araújo, subcampeona mundial sub-17, y Paloma González, con España sub-16, reverdecen los años 70
España es más España con jugadoras célticas. Especialmente si son nacidas en Vigo. La Federación Española de Baloncesto comenzó a salir al exterior en los 70, con sus primeras participaciones en las fases finales de los Campeonatos de Europa júnior (San Remo, 1973, quinta edición) y juvenil (Szecsin, 1976, primera edición). La selección absoluta ya disputaba el Europeo (Italia, 1974, decimocuarto torneo). Y el Celta fue referencia.
Las internacionales que el club vigués aportó en este periodo inicial en el que por fin el deporte femenino asomaba a Europa no fueron ni las primeras gallegas (el Medina coruñés aportó antes) ni novedad celeste (1971, Mari Carmen Martínez, amistosos en Madrid), pero el mando madrileño-catalán quedaba por fin en segundo plano.
Ahora, el Celta Selmark recupera aquellos tiempos. Es cierto que entre los gloriosos 70 y 80 y 2014 ha habido varias célticas en selecciones femeninas, pero igualmente ha quedado inventariado que mayoritariamente no habían nacido en Vigo. Como si el producto local no volviese a ser tan bueno como aquella generación forjada en Las Acacias.
Tamara Abalde, nacida en Ferrol (aunque para el vigués sea de aquí, se vino al Compañía de María con ocho años); Iria Villar también gallega pero no viguesa, la ourensana María Centeno... La larguísima Leyre Carrascosa (Vigo, 1995) apareció como excepción y ahora sigue su carrera en las universidades de Estados Unidos.
Ahora, la situación ha cambiado. En el 74, las viguesas Maribel Lorenzo y Ángeles Liboreiro eran llamadas a la absoluta y a la júnior, respectivamente. Además, coincidirían ese verano en el Europeo absoluto de Italia con Carmen Fraile, céltica, aunque nacida en León. El Celta había acabado subcampeón de Liga y ya asustaba. Cuarenta años más tarde, turno de Araújo y González. Nuevos brotes verdes vigueses en el Mundial sub 17 (Araújo, plata) y con Paloma.
En 1975, otra viguesa, Susana García, debutaba con la selección júnior en el Europeo de As Travesas. Era la sexta edición del certamen y España, que en Vigo terminó en sexto lugar, había aparecido en el foro internacional en el torneo anterior, en el 73. Además, en 1976 la pívot céltica Carmen Martínez disputaba la primera edición del Eurobasket juvenil en Polonia (ahora equivalente al Europeo sub 18).
Fueron los primeros pasos que llevaron después al título de Liga de 1977 y a las glorias siguientes. Ángeles Araújo, madre de María Pérez Araújo, debutó en la júnior en 1980. Tal vez asistamos ahora a un bucle temporal. n
