El técnico vigués Óscar Bruzon ha llevado al New Radiant a ganar la liga de las Maldivas
El New Radiant conquistó el domingo el título de liga de las Maldivas al derrotar al TC Sports Club (3-2), el segundo clasificado, en la penúltima jornada. Al frente del campeón está un técnico vigués, Óscar Bruzon, un producto de las categorías inferiores del Celta –como jugador y entrenador– que hoy triunfa entre atolones y corales. "Estoy en un auténtico paraíso", reconoce horas después de proclamarse campeón. "Aunque no lo estoy disfrutando porque al final estoy centrado en el día a día", añade. Porque en España, en la India –donde pasó cinco años– o en las Maldivas, Bruzon es ante todo entrenador. Y fútbol es fútbol, que diría Vujadin Boskov.
"En el contexto sudasiático, es una liga bien considerada", explica Óscar Bruzon (Vigo, 1977) sobre la Dhivehi League. "Los tres o cuatro equipos más fuertes están al mismo nivel que los de la India, por ejemplo. Al ganar el título, nos clasificamos para disputar el equivalente a la UEFA europea y no es la primera vez que un equipo de Maldivas llega a la fase final. Ese será nuestro objetivo", agrega.
Bruzon renovó su contrato hace tres semanas y afronta 2018 (la temporada en Maldivas es anual) con ambición. Ha comenzado a trabajar en la configuración de la plantilla y a diseñar una pretemporada en la que tratará de poner al New Radiant a punto para la AFC Cup, la segunda máxima competición del fútbol asiático, con los clubes divididos por criterios geográficos. Los equipos de Maldivas se enfrentan a los de países como India, Birmania, Filipinas, Malasia, Pakistán o Vietnam. El New Radiant alcanzó las semifinales de la AFC Cup en 2005 y Bruzon aspira a volver a situar a su equipo entre los mejores del continente.
El vigués se formó como futbolista en las categorías inferiores del Celta y llegó a jugar en Segunda División con el Universidad de Las Palmas. Pero una grave lesión truncó su carrera y pasó del césped al banquillo, de nuevo con el Celta como escuela. Ejerció como técnico en la India (Sporting de Goa y Mumbai City) y fue ayudante de Fernando Vázquez en el Mallorca. A mediados de este año, decidió hacer las maletas para regresar a Asia. "Después de mi etapa en India y en el Mallorca, con Fernando Vázquez, recibí diferentes propuestas. Tenía que tomar una decisión: esperar a que Fernando cogiera un equipo y contara conmigo o aceptar una de las ofertas que tenía. Mi intención no era regresar a Asia, donde ya había estado cinco años, pero la propuesta del New Radiant apuntaba a proyecto de 'caballo ganador' y las referencias que me dieron eran muy buenas", explica.
"El New Radiant es el equipo de referencia en Maldivas. Es el que más títulos ha ganado y el que más gente lleva al estadio", señala Bruzon, cuyo equipo se proclamó campeón tras ganar once partidos de forma consecutiva. Llegó a Maldivas de la mano del representante Ángel Ruiz, de Ruiz & López, un agente que conoce a la perfección el mercado asiático y que también llevó al New Radiant a dos futbolistas españoles. El gaditano Adrián Gallardo fue el primero en llegar y animó a Bruzon a probar la experiencia. Su papel fue clave en el título del New Radiant, al firmar 19 goles en 13 jornadas, como también lo fue el del excéltico Ángel Ruiz 'Candela', un centrocampista que militó en el filial del Celta entre 2008 y 2010 –Eusebio Sacristán lo hizo debutar en el primer equipo– y que también ha renovado su contrato para 2018.
La liga de Maldivas es peculiar, igual que un país formado por más de mil islas. Los cuatro equipos de Malé –la capital, a la que pertenece el New Radiant– se enfrentan en el campeonato a los cuatro mejores equipos del resto de islas. Todos juegan en el mismo campo, el Rasmee Dhandu Stadium, al que acuden más aficionados cuando el que juega es el equipo de Bruzon.
"Se toman el fútbol muy en serio. No es como en la India, donde el deporte más popular es el criquet. Aquí el fútbol tiene muy buena acogida", explica el técnico vigués, que tratará de ganar las dos Copas del país antes regresar de vacaciones a Vigo el 15 de diciembre. Ahora está en "el paraíso", afirma. Está allí con su pareja y ha recibido la visita de amigos como los de La Conservera del Surf de Patos, pero vive centrado en su cometido profesional. "Me he criado en la escuela del Celta y cuando sales, te das cuenta de lo bien que se trabaja en España. Aquí no están acostumbrados y cuando se encuentran con entrenamientos dinámicos y en los que se entrenan multitud de aspectos del juego, lo disfrutan mucho. Al final, el buen trabajo se nota en los partidos", explica el técnico vigués, que trata de contagiar su gen competitivo a sus futbolistas: "Me gusta tener presión porque tengo un motor competitivo. De lo contrario, estaría dedicándome a otra cosa. Y esa competitividad es la que trato de transmitir a la gente". Así se conquista el paraíso.
