La selección gallega sorprendió a los nipones en un partido en el que fue de menos a más
Galicia volvió a sorprender a Japón y, tras el empate cosechado el pasado sábado en Bueu, ayer se impuso a la selección nipona en un partido en el que fue de menos a más y se llevó la victoria en unos espectaculares minutos finales.
El conjunto asiático, dirigido por Carlos Ortega, salió decidido a evitar sorpresas en el Municipal de O Rosal y desde el primer minuto parecía mucho más concentrado que el día anterior.
Enfrente, Galicia hacía también gala de su solidez defensiva y los minutos fueron pasando con algunos intercambios de goles (3-3, min.10). A partir de ahí, apareció el juego combinativo de los japoneses y la selección mundialista logró una corta renta en el marcador (4-6, min.15), que fue creciendo a medida que pasaba el tiempo.
A Galicia se le hacía cada vez más complicado marcar, mientras que el equipo nipón se encontraba cómodo en el cancha. A falta de cinco minutos para el final de la primera parte, Japón ganaba por cinco goles, pero Galicia logró recortar distancias para llegar al descanso con sólo dos tantos de desventaja (11-13).
La segunda parte fue muy similar a la del día anterior en Bueu, con distancias cortas en el marcador e intercambio de goles, aunque en esta ocasión con Galicia por debajo en el marcador.
Japón no lograba romper el encuentro –tres goles era la máxima renta que lograba– y la selección gallega parecía incapaz de empatar a pesar de disponer de varios balones para hacerlo.
Algunos errores por los extremos impidieron que la igualada llegase antes, pero finalmente llegó. En el minuto 55, Galicia consiguió alcanzar a Japón en el electrónico (24-24). El seleccionador gallego, Víctor García 'Pillo', pidió tiempo muerto y en los últimos cinco minutos de juego, Galicia concretó la victoria con una estrategia perfecta.
Suso Soliño puso por delante a su equipo cuando todavía no se había cumplido el minuto 56 y, a partir de ese momento, los gallegos ya no se dejaron atrapar hasta cerrar el choque con el 28-26 final.
El jugador del Frigoríficos del Morrazo fue precisamente la principal referencia en ataque de la selección absoluta gallega al marcar 9 goles en el tiempo que estuvo sobre la pista. El equipo cangués fue ayer el más representado en Galicia, que obtuvo una gran victoria frente a la selección de Japón, equipo que disputará el Campeonato del Mundo. En O Rosal, los de Pillo pudieron con el cuadro nipón.
Galicia:
Javi Díaz, Pablo Vidal, (2), Serafín Pousada, Dani Cerqueira (4), David García, Eloy Krook (2), Paulo Dacosta, Germán Hermida (2), Kevin García, Rubén Soliño (1), Suso Soliño (9), Víctor Rodríguez (4), Roberto Sánchez (3) y Pablo Castro (1).
Japón:
Toru Takeda (1), Kairi Kochi (4), Takashi Kato (1), Jin Watanabe (4), Jun Mori, Daichi Komuro, Masatake Kimura, Kento Vegaki (2), Shinnosuke Tukuda (3), Goki Koshio (1), Kiriki Shida (4), Kiriki Motoki (2), Hiroyasu Tamakawa (2), Yuto Agarie (1), Kohei Narita(1), Atsuchi Mekaru, Remi Anri Doi y Takayuki Shimuzu.
Parciales:
1-0, 3-3, 4-6, 6-8, 7-10, 11-13 (descanso), 16-17, 16-19, 19-20, 21-23, 24-24 y 28-26.
Árbitros:
Alberto Rodríguez e Sergio Rodríguez (Galicia). Excluyeron dos minutos a Pablo Vidal por Galicia y a Takashi Kato, Jun Mori, Goki Koshio y Remi Anri Doi por Japón.
Incidencias:
Partido amistoso disputado en el Pabellón Municipal de O Rosal con lleno en la grada. Asistieron la secretaria xeral para o Deporte, Marta Míguez, y el alcalde de O Rosal, Jesús Fernández.
