METEOROLOGÍA
Una masa de aire frío y nevadas reciben el invierno
No fueron pocos los vigueses los que amanecieron con un pequeño susto en el cuerpo cuando vieron, en la AP-9 y en la terminal portuaria decenas y decenas de vehículos militares transportando a centenares de miembros del ejército, que se reunieron junto a una gran embarcación desde la que zarparon.
A pesar de lo que pudiese parecer, no se trataba de una situación de emergencia. Los soldados formaban parte, según informaron a este periódico fuentes de la Comandancia Naval de Vigo, de una delegación de unos 1.400 miembros del ejército español que se estaba trasladando hasta los países bálticos (Estonia, Letonia y Lituania) para unas maniobras de entrenamiento de la OTAN, ya previstas y planeadas desde hace mucho tiempo y sin ninguna relación con algún conflicto bélico activo.
Curiosamente, además de los vecinos de Teis y Guixar, también notaron la presencia militar en Vigo los usuarios del túnel de Beiramar, ya que, mientras se estaba realizando este traslado de militares hacia el puerto, gran parte del túnel presentaba importantes retenciones a causa de la Policía Militar, que se aseguraba que todo transcurría con normalidad en los puntos más críticos cercanos al puerto vigués mientras llegaban todos los miembros del ejército. Afortunadamente, todo se quedó en una anécdota que contar para los que tardaron más de cinco o diez minutos en atravesar dicho túnel debido a la congestión y no hubo incidente alguno.
Vigo no es ajena a maniobras de entrenamiento del ejército. Sin ir más lejos, hace apenas dos semanas dos cazas Eurofighter sobrevolaron la Ría haciendo vuelos de práctica y se dejaron notar en toda la ciudad.
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