“Hacen falta donantes de médula ósea, hay miedo sin fundamento”

El Registro Español de Donantes de Médula Ósea (Redmo) cuenta con unos 500.000 donantes inscritos, una participación baja para un país de casi 50 millones de habitantes y que destaca a nivel mundial por la donación de órganos y sangre. En Alemania superan los 10 millones de donantes de médula ósea, una cifra que le sitúa en el primer puesto a nivel mundial. La Asociación gallega de transplantados de médula ósea y enfermedades oncohematológicas (Asotrame) quiere concienciar sobre las vidas que pueden salvar estas donaciones. Su delegado en la provincia de Pontevedra, Manuel Estévez, recibió un trasplante gracias a una donante del país germánico. “Cuando alguien enferma, no es tan fácil encontrar un donante. Primero se busca un hermano, pero en el 80% de los casos no son compatibles y es necesario acudir a Redmo para buscar un donante, en mi caso apareció en Alemania”, explica. Considera que uno de los problemas para dar el paso de apuntarse en el registro son los miedos infundados, como pensar que duele cuando no es así, o el desconocimiento sobre cómo se hace esta donación. “No estamos hablando de médula espinal, es médula ósea y eso es sangre. Mucha gente piensa que le van a pinchar en la columna, pero la mayoría de las veces es una extracción de sangre”, explica.

Promover las donaciones es uno de los objetivos de la primera cena baile benéfica que organiza el Liceo en favor de Asotrame en Vigo. Será el próximo día 12 de septiembre en el Liceo Marítimo de Bouzas, con un coste de 30 euros por persona (5 euros serán de donativo para la entidad) o de 6 euros si solo se acude al baile y con una copa incluida. Asotrame invita a la población a participar en su primer acto benéfico en Vigo, para el que también hay fila cero y en el que se sortearán regalos donados por las empresas patrocinadoras.

El dinero que se recaude permitirá financiar los servicios gratuitos que prestan en Vigo a las personas diagnosticadas de cáncer hematológico y a sus familiares. Una psicóloga y una trabajadora social ofrecen la atención que necesiten estos pacientes, pero además la asociación impulsa un proyecto denominado “Apoyo entre iguales” en el que los voluntarios hacen tareas de acompañamiento Acuden desde hace un año a la planta de Hematología del Cunqueiro, con dos visitas al mes a los pacientes que lo deseen. La entidad también da charlas en centros educativos, empresas y entidades que lo solicitan para concienciar sobre esta enfermedad y las donaciones de médula ósea.

“Cuando aparece en tu vida la palabra leucemia, linfoma o mieloma aparecen muchos miedos. Te arropan muchísimo, tu familia, los amigos y los médicos porque tenemos una sanidad pública increíble. Pero yo eché de menos hablar con alguien que lo hubiera pasado, durante uno de mis ingresos más largos pensé que debía hacer algo y por eso entré como voluntario en Asotrame. Los pacientes te cuentan sus sensaciones y las entiendes perfectamente” afirma Manuel Estévez. Los pacientes salen de la rutina con estas visitas en un proceso que suele durar meses o incluso un año, desde el diagnóstico hasta que se realiza el trasplante y se pasa por la recuperación.

Manuel Estévez se recuperó de una leucemia y un linfoma y aunque todavía no está trabajando sí que recuperó una de sus grandes pasiones, el deporte. A principios de este año corrió la Vig-Bay y este año es embajaor de la Media Maratón de Vigo. “Para mí el deporte fue la salvación, en ningún momento lo dejé del todo, cuando tenía algo de fuerza entre quimio y quimio hacía algo. Se lo digo a todo el mundo, no hace falta correr o ir al gimnasio, pero sí moverse, caminar, hacer un poquito de fuerza. Eso anima y ayuda”, apunta.

Asotrame espera seguir creciendo en Vigo, con más servicios y más acompañamientos.