El talento de Mr Lores

El alcalde de Pontevedra, el nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, convocó a un buen número de colegas para hacer una especie de frente común a favor de la supresión del peaje en la AP-9 al menos en el tramo entre la Boa Vila y Vigo, el más transitado y sin apenas alternativas viables. Se dirigió no solo a los de su área, sino también a algunos alcaldes en torno a Vigo, como Redondela, entre otros. ¿Va a valer para algo? Probablemente no, pero siempre ayudará contar con voces insistentes en el mismo sentido. Recordemos lo que sucedió con el puente de Rande, donde una asociación logró la desaparición del pago entre Vigo y O Morrazo. Aparente, que no real: ahora el Ministerio de Transportes abona a la empresa Audasa un peaje en la sombra, con los impuestos de todos. 

Ciertamente, si el área metropolitana de Vigo funcionara, esta ciudad dispondría de un instrumento afilado para liderar este tipo de propuestas: no es lo mismo hablar en nombre de la primera ciudad de Galicia que de una conurbación de medio millón de habitantes. Eso lo sabe muy bien Oporto, cabeza de un área de 1,8 millones de residentes, referente absoluto en la política y economía del país vecino, a la altura de Lisboa. Oporto por sí solo es una ciudad de apenas 240.000 vecinos, pero con sus aliados es otra cosa en todo.

Lores ha demostrado un enorme talento para mantenerse durante 25 años al frente de una ciudad que vota reiteradamente conservador en todas las elecciones salvo en las municipales. Llegó a la alcaldía con dos propuestas que lograron la aprobación de su parroquia: una, suprimir los coches de la mayor parte del casco urbano; dos, oponerse a que Vigo tuviera dotaciones provinciales como la Audiencia o la Delegación de la Xunta, o para ser más exactos, apostaba por mantener el privilegio de exclusividad de servicios de la capital, aunque fuera contraviniendo el ideario anticentralista del BNG. En definitiva, que tu mano derecha no sepa qué hace la izquierda.