Pedro Sánchez y sus 11 viviendas para Galicia

Bueno, bueno, bueno… pero qué tomadura de pelo total y absoluta a 2.705.833 gallegos y gallegas por parte del presidente del Gobierno de España y su ministra de Vivienda. Entro en materia ya porque esto es surrealista total. El Sepes, la Entidad Pública Empresarial de Suelo, adscrita al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, ha licitado este mes de junio los proyectos de edificación de 1.092 viviendas en doce actuaciones residenciales de toda España. A estas, habría que añadir las 596 ya licitadas, llegando así hasta las 1.664 viviendas. Pues bien, este listado únicamente incluye la creación de un máximo de 11 viviendas protegidas de alquiler asequible en A Coruña. La única ciudad gallega “beneficiada” de esta medida, y publicada en estos días en la Plataforma de Contratación del Estado.

Es decir, el presidente del Gobierno de España, el que anunció 184.000 viviendas a bombo y platillo, el que anunciaba grandilocuentemente triplicar los fondos para viviendas protegidas en la reciente conferencia de presidentes de las CCAA, ese mismo presidente es el que en un ejercicio de bondad infinita riega a los 313 concellos de Galicia -y a más de dos millones setecientos mil habitantes- con un generoso y espléndido premio de… ¡11 viviendas de alquiler asequible! ¡Dios mío, Dios mío!

Pero no acaba aquí el asunto, no. Y es que, según las declaraciones de la ministra de Vivienda, se favorece la creación de demanda de vivienda industrializada en consonancia con el PERTE de la Industrialización de la Vivienda, aprobado en Consejo de Ministros el pasado mes de mayo, y que acelerará la creación de un parque público de vivienda asequible en las comunidades de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia, Melilla, Baleares y Canarias. Es decir, Galicia no existe para el gobierno de Pedro Sánchez y su cohorte de ministros y ministras.

Miren ustedes, el precio de la vivienda sufre la mayor subida en dos décadas y principalmente se debe, en gran medida, a que el Gobierno está asfixiando la oferta de la vivienda con un exceso de regulación e inseguridad jurídica. Y es que el precio de la vivienda libre se dispara un 12,2%, su mayor alza en 18 años. Todos los obstáculos que ha impuesto el Gobierno de Pedro Sánchez en materia de vivienda han tenido ya su nocivo efecto. Y con un resultado alarmante; el precio de la vivienda libre se ha disparado un 12,2% en el primer trimestre del año en relación al mismo periodo de 2024, registrando así su mayor alza interanual desde el primer trimestre de 2007, cuando subió un 13,1%, según el Índice de Precios de Vivienda (IPV) del Instituto Nacional de Estadística. También otro dato que se ha conocido a través del INE es que la compra de vivienda por nuestros jóvenes se ha desplomado considerablemente. Es decir, que las políticas de vivienda en España que está aplicando el sanchismo están perjudicando enormemente la accesibilidad a la vivienda por parte de nuestros jóvenes, y ya no les hablo de las unidades familiares económicamente vulnerables.

España está al límite. El sanchismo, y todo su turbio y cuestionado entorno, está derivando a este país al limite de lo soportable. Y así ha quedado reflejado en los más de 100.000 españoles y españolas que este pasado domingo se manifestaron en Madrid en representación de millones de ciudadanos.