Miraflores, otra herencia de Don Ventura

Publicado: 12 feb 2010 - 01:00 Actualizado: 10 feb 2014 - 12:48

Como era previsible, el gobierno de la Muy Leal ha decidido recurrir la sentencia que condena a la Administración local al pago de unos 10 millones de euros por el caso Miraflores. Esto supondrá que la cuenta continuará aumentando a un ritmo de 600 euros diarios hasta que llegue otro fallo, que con seguridad será igual de condenatorio. No es crítica: cualquier otro gobierno local habría hecho lo mismo que el bipartito vigués porque ninguno quiere hacerse cargo de una hipoteca de este calibre que descuadra cualquier presupuesto. Lo de Miraflores tiene un origen difuso pero un culpable directo: el inefable Ventura Pérez Mariño, que en sólo seis meses dejó una huella indeleble. Pérez Mariño y los técnicos municipales de su breve mandato (junio-diciembre de 2003) llegaron a la extraña conclusión de que el ayuntamiento iba a pagar demasiado como contraprestación por los terrenos adquiridos a la promotora Miraflores, a la que ya se le había anulado una permuta en A Bouza y había logrado a cambio dos parcelas en Rosalía de Castro-2 y plaza Elíptica. Todo ello sumaba menos de siete millones de euros. Siete años después, el Concello tendrá que abonar al menos diez millones gracias a que Don Ventura decidió anular el convenio y someter a la Administración local a un inevitable pleito sobre la indemnización. Todo un éxito de gestión: la alegre decisión de los responsables municipales de entonces cuesta de momento tres millones más, o sea, 500 millones de las desaparecidas pesetas. Pérez Mariño, que vuelve a ser juez después de convertirse en abogado y después en alcalde, fue víctima de sus enormes errores. Y de un fallo de cálculo: el PSOE a la hora de escoger entre la Alcaldía de Vigo y la Diputación de Coruña no iba a dudar. Y no lo hizo.

Contenido patrocinado

stats